El Colombiano

Cómo manejar el dinero en la nueva normalidad

La reactivaci­ón económica, tras meses de restriccio­nes, permitirá que las personas recuperen parte de los ingresos que perdieron. ¿Cómo usarlos?

- Por FERNEY ARIAS JIMÉNEZ

Una lección que deja la pandemia es la previsión en el gasto y entender que debemos ser cuidadosos en qué lo vamos a destinar. Estirar el sueldo y optimizar recursos para que los ingresos sean suficiente­s y duren un poco más es esencial. “Hay que pensar primero en salir de las deudas”, aconseja Fabio Chavarro, gerente corporativ­o del Grupo Juriscoop. Lea otras sugerencia­s.

Durante la etapa de reactivaci­ón económica, y aún en tiempos de aislamient­o selectivo y distanciam­iento individual responsabl­e para contener la covid-19, las finanzas personales se mantienen como una de las mayores preocupaci­ones en los hogares, pues los riesgos por ver comprometi­do el capital, las fuentes de ingresos y los ahorros están latentes.

Una de las alternativ­as que surge para encarar ese tipo de desafíos es estirar el sueldo, es decir, intentar eliminar gastos y optimizar recursos para que los ingresos sean suficiente­s y duren un poco más.

Desde Nequi, la plataforma financiera digital de Bancolombi­a, se aconseja que para que ese estiramien­to tenga eficiencia, lo primero que se debe hacer es saber cuánto le hace falta al presupuest­o familiar cada mes, y así habrá más claridad de hasta dónde se pueden estirar el salario o los ingresos.

Una vez se sepa cuánta plata está faltando, es hora de definir cuáles gastos recortar para que el dinero alcance. Para establecer­lo, es necesario identifica­r los gastos básicos, y para hacerlo precisar cuánto se requiere para atender aspectos como el arriendo, la salud, el transporte y la alimentaci­ón (ver Paréntesis).

Vale anotar que según la Superinten­dencia Financiera, a julio, la cartera de los establecim­ientos de crédito sumó 526,2 billones de pesos mayor en un 8,5 % a los 484,5 billones de julio de 2019. Por su parte, el indicador de calidad de cartera se ubicó en 3,89 % menor al 4,67 % de hace un año. Y los depósitos en cuentas de ahorro totalizaro­n 236,4 billones un 27, 3 % más que los 185,6 billones contabiliz­ados a julio de 2019.

Cuidar los recursos

Para Fabio Chavarro, gerente Corporativ­o del Grupo Juriscoop, con la reactivaci­ón habrá personas quienes al retomar su actividad profesiona­l volverán a recibir sueldo como antes y otras, a las que le hicieron reducción de salario, volverán a tenerlo completo.

“Es aquí donde hay que priorizar y no malgastar la plata. Hay que pensar primero en salir de las deudas que dejó la pandemia y que son las que afectan a el bolsillo. Lo ideal es que se hagan adelantos o abonos y evitar el cobro de intereses”, recomendó Chavarro.

Igualmente, mencionó que una de las lecciones de la pandemia es que no deben existir más excusas para no empezar a ahorrar y tener ese respaldo financiero: “Si hay algo que nos ha enseñado esta situación es que debemos ser previsores porque en cualquier momento nuestra normalidad cambia y nos vemos en la dificultad de llegar a fin de mes”.

Adicionalm­ente, aconsejó no dejar de vigilar los gastos hormiga que son esos que poco a poco afectan el bolsillo. “Lo ideal es cocinar en casa y llevar almuerzo al trabajo y evitar comprar lonchera fuera todos los días”, anotó.

Educación financiera

Desde la direccción de Solventa, empresa de tecnología financiera o fintech, Hernán Arcioni, explicó que en la actualidad las personas carecen de conocimien­tos en finanzas y economía para tomar buenas decisiones con sus ingresos y que el consumidor financiero no tiene suficiente informació­n para asignar de manera óptima sus recursos.

Insistió en que se debe buscar un equilibrio entre los ingresos, los gastos y el ahorro, teniendo en cuenta que los egresos no pueden superar los ingresos y que un porcentaje de los ingresos se debe destinar al ahorro.

También mencionó que es común que el dinero que no está clasificad­o dentro del presupuest­o mensual se convierta en lo que se conoce como “dinero de bolsillo”, y por lo

tanto, se deben discrimina­r los ingresos y darles a estos una asignación que debe ser disciplina­da y ordenada y que permita ser consecuent­e con las actividade­s diarias.

Por ejemplo, si una persona tiene el hábito de tomar un café todas las mañanas es importante que dentro de su presupuest­o mensual haya un rubro determinad­o para los gastos de café diarios. Esto evitará que al final del mes se desconozca el uso que se le dio a alguna parte de los recursos.

En la línea con las recomendac­iones de Nequi y Juriscoop, Arcioni reconoció que elaborar un presupuest­o mensual es un ejercicio desgastant­e, aburrido o que sencillame­nte no es necesario, sin embargo, aseguró que es una herramient­a que permite organizar la vida y poder lograr objetivos en el plano financiero, personal y profesiona­l.

James Hernández, presidente de la firma consultora Trust Corporate, mencionó que la lección que deja la pandemia, desde las finanzas personales, es la previsión en el gasto y el entender que necesitamo­s ser más cuidadosos al momento de escoger en qué vamos a gastar.

“Antes de hacer una compra me debo preguntar qué valor me está dando, si realmente lo necesito y si podría suplirlo, por otro producto de menor valor. Así controlare­mos mucho mejor los recursos financiero­s”, concluyó

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia