LA LLEGADA DE GABRIEL JAIME RICO
El 26 de agosto de 2020, el director financiero, Álvaro Villada, firmó un convenio con Acopi (Asociación Colombiana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas) para “aunar esfuerzos para la implementación de procesos de transformación digital para micro, medianas y pequeñas empresas” del Aburrá. El valor era de $2.916 millones, de los cuales el Amva aportaba casi el 85 % ($2.579 millones).
Un mes después, Acopi designó como gerente territorial exclusivo para el Aburrá a Gabriel Jaime Rico, quien había estado en el comité de empalme de Daniel Quintero, asesorando en temas relacionados con EPM, como él mismo lo confirmó. La coincidencia generó suspicacias entre empresarios que señalaron un presunto favorecimiento. Rico le dijo a EL
COLOMBIANO que no estaba vinculado a Acopi al momento de la firma. “Este tipo de convenios son comúnmente firmados con gremios y con las Cámaras de Comercio”, comentó. Agregó que ya no asesora a Quintero y que llegó al cargo “por mi experiencia empresarial de 20 años en lo público, lo privado y la cooperación internacional; recibí invitación de la Dirección Regional para apoyar el trabajo de reactivación de las Mipymes”. A su turno, el director Palacio señaló que el convenio se venía trabajando desde junio y que Acopi fue elegida por su trayectoria de más de 68 años, porque tiene más de 3.200 asociados. Sobre Rico dijo que lo conoce y que se han encontrado en distintos escenarios profesionales. Describió la relación entre ambos como cordial.