A cuidar la salud mental
Teleconsultas por estos casos crecieron 1.275 % en 2020 en Antioquia, respecto a 2019, según el Hospital Mental. Radiografía de la situación.
La pandemia puso a los antioqueños a hablar, con mayor frecuencia, sobre salud mental. Las pérdidas sociales, económicas y humanas que ha traído consigo la covid-19 han contribuido, según Alberto Aristizábal, gerente del Hospital Mental de Antioquia (Homo), a que el bienestar mental de los paisas se vea perturbado.
De hecho, hace algunos días varios números ganaron relevancia en la agenda pública con un pico de ocupación en los centros de salud mental del departamento. Dos de esos casos son bien ejemplificados por los registros del Homo y de la Unidad de Salud Mental de Metrosalud, que presta servicios de segundo nivel de complejidad psiquiátrica.
Sobre el primero, Aristizábal expresó que, si bien se han tenido picos y valles, hace algunos días el servicio de urgencias y de hospitalización llegó a ese 90 % de ocupación que es temido, por estos días, en varios frentes del sistema de salud. Con la unidad de Metrosalud ha sucedido lo mismo, según la entidad, la ocupación de pacientes ha llegado al 91 % durante este año.
Aunque los picos han sido transitorios, caso del Homo, donde la ocupación ya se encuentra en el 85 % (de 200 camas hay 170 ocupadas), Aristizábal aclaró que otro dato de 2020 demuestra el alza en la solicitud de servicios en esta materia: “Pasamos de atender 1.600 consultas en 2019 de manera virtual a unas 22.000 consultas de este tipo en 2020”. La solicitud de este servicio se multiplicó por 13, respecto a 2019.
A propósito de esta situación, EL COLOMBIANO consultó el panorama en la ciudad y qué factores explican las variaciones en las demandas de servicios de salud mental. También le contamos cuáles son las estrategias activas en la región y qué líneas de atención están disponibles, en caso de necesitarlo.
Cifras de contexto
Respecto a las variaciones en la ocupación y el número de consultas, el gerente del Homo aclaró que, al inicio de la pandemia, se registró una reducción en los servicios de consultas, hospitalizaciones y urgencias, asociada, en su momento, al temor de contagiarse con el coronavirus. “En el segundo semestre de 2020, la demanda se normalizó en la institución. Por eso aumentamos las atenciones virtuales”.
En esta línea, las cinco primeras causas de consulta psiquiátrica que registró el Homo el año pasado fueron el trastorno afectivo bipolar, con un total de 10.370 consultas; las esquizofrenias, con 7.469; la discapacidad cognitiva, con 6.666; la depresión, con 6.120; y los trastornos de ansiedad, con 5.007 (ver Gráfico).
Estas morbilidades, que dibujan el panorama en Antioquia, no se alejan de las que aquejan a los habitantes de Medellín. Juliana Lotero, profesional especializada de la Secretaría de
Salud de Medellín, detalló que “se ha identificado que las consultas por trastornos de ansiedad o depresión aumentaron en 2020, en comparación con 2019”. En el primer año se registraron 150.995 consultas por estos trastornos; en 2019, fueron 47.208.
Pese a que estas cifras validan que las solicitudes por afecciones en la salud mental aumentaron, Lotero señaló que es importante destacar un dato: en 2020 las autoagresiones bajaron. “Con este comportamiento pudimos visualizar que, aunque se esperaba que hubiese un aumento, en estos eventos no lo hubo. El año pasado se presentaron 166 casos; en 2019, 195”.
En cuanto a las atenciones en urgencias, Aristizábal y Lotero coincidieron que las solicitudes se han mantenido, en buena parte del tiempo, estables. El miedo a contagiarse, afirmaron,