“No se puede dividir
José Alejandro Cortés, expresidente del Grupo Bolívar, colombiano ejemplar en la categoría EmpresaPersona 2006.
Todo empleado nuevo que ingresa al Grupo Bolívar, se lee en la biografía Se vale ser bueno (2021), escrita por la periodista Alejandra de Vengoechea, recibe en su inducción una dosis de respeto, equidad, honestidad y disciplina, y también de entusiasmo, alegría y buen humor. Estos valores son parte del legado que José Alejandro Cortés le ha dejado a la organización que crearon su padre, José María Cortés, y su tío Enrique, la misma a la cual le dedicó más de la mitad de sus 90 años de vida y de la que es el actual presidente de la Junta Directiva.
En ella tuvo el honor de ser parte de la fundación de sus empresas principales, entre ellas el Banco Davivienda, la Constructora Bolívar y Seguros Bolívar, pero esto quizá pueda ser considerado como una anécdota al lado de la trascendencia que su figura ha tenido en la construcción de una sociedad más justa y equitativa, para lo cual José Alejandro se ha valido de su posición en el empresariado colombiano, pero no para hacerles el juego a sus intereses propios sino a los que el país y su gente necesitan.
Recientemente, la noticia de la muerte del ajedrecista Gildardo García, el Gran Maestro colombiano –quien falleció en enero de este año por covid-19–, le produjo una tristeza profunda. No solo porque le evocó los encuentros que ambos tuvieron en su oficina en los que el deportista le enseñó a jugar una de sus grandes aficiones, sino por todo el apoyo que le brindó a este y a su familia de manera desinteresada.
García fue uno de los tantos colombianos que conoció, en vida, la generosidad sin lí