La Vuelta a Oriente para degustar otros sabores
La región se está consolidando como destino gastronómico. Hay variedad e innovación.
Recorrimos las vías de esta región antioqueña y encontramos novedosas propuestas que van más allá de los platos tradicionales como el sancocho, frijoles y chicharrones. Ahora hay restaurantes en casonas viejas que en sus cartas tienen pastas, sushi, comida francesa y hasta fondue, ya sea de quesos, pollo o carne, que el comensal va preparando sobre la mesa. ¡Antójese!
Si bien las tradicionales arepas de chócolo, los chicharrones o los frijoles son el común denominador en el menú de los restaurantes asentados a lo largo de la llamada Vuelta a Oriente, la oferta gastronómica ha crecido a otros sabores.
En el recorrido por las vías de la región ya no solo se asientan fondas y restaurantes criollos que ofrecen sancochos o bandeja paisa o asados, sino que se encuentran pastas, pizzas, sushi, mariscos, paellas, comida francesa, tailandesa o vietnamita, que han convertido al Oriente antioqueño ya no solo en un destino turístico, sino gastronómico.
Con el apoyo de las sugerencias en Instagram de los lectores de EL COLOMBIANO (que recomendaron más de 50 restaurantes) y la asesoría de Tulio Zuloaga (Tulio Recomienda) dimos nuestra propia Vuelta Oriente y visitamos cuatro sitios, que marcan diferencia por su arquitectura, carta y modelo de atención.
Barro y Petit Amelia, en El Retiro; San Luca, en La Ceja, y Casa Carrataplan, en El Carmen de Viboral tienen en común que son proyectos que surgieron en medio de la pandemia y que le apuestan a la región, casi el 90 % de los ingredientes que usan en sus cocinas provienen directamente de los campesinos de la zona.
Son espacios para reencontrarse con las raíces, con la nostalgia, con las viejas casonas y la herencia montañera, mientras que se disfruta de una cocina “alternativa”.
Esta es la primera de una serie de entregas acerca de la oferta gastronómica en la periferia de Medellín. La otra semana estaremos nuevamente en el Oriente antioqueño, esta vez en el eje que integra la autopista Medellín-Bogotá y los embalses, en los municipios de Guarne, Marinilla, Santuario, El Peñol y Guatapé ■
“La gente visita el Oriente porque encuentra una calidad especial en sus pueblos, en su gente y en su cocina”.
ADRIANA ZELAYA Barro