Hidroituango logra poner una nueva pieza clave
La megaobra logró instalar un estator en su segunda unidad de generación. Así avanza el proyecto.
El proyecto de Hidroituango registró este fin de semana un nuevo avance en su construcción, con la instalación de un estator en su segunda unidad de generación. Esta acción, clave para que la obra pueda encenderse antes de noviembre de este año, se suma a otros progresos que ya reportados, principalmente ubicados en la primera unidad generación.
Según informó EPM, la culminación de esta última maniobra se produjo luego de cuatro meses de trabajo, en el que participaron al menos 200 empleados, tanto de la compañía como de los contratistas del megaproyecto.
Para ilustrar la importancia del avance, Luis Alberto Sierra Sierra, quien se desempeña como gestor de equipos electromecánicos de Hidroituango, señaló que el estator es el segundo componente más importante de los generadores de energía que se construyen en el proyecto.
“El primero es el rotor y el segundo es el estator, a través del cual sacamos el voltaje hacia los transformadores elevadores. El estator es la pieza en la cual se induce el voltaje que está produciendo el rotor al estar girando, este captura esta tensión, a 18 kilovoltios, y la lleva hacia los transformadores de potencia, para elevarla a 500 kilovoltios y de ahí ser transmitida hacia la subestación de generación”, explicó Sierra.
William Giraldo Jiménez, vicepresidente de Proyectos Generación de Energía EPM, destacó por su parte que la pieza tiene un peso de 360 toneladas, 4,8 metros de altura y
un diámetro externo de 14 metros, lo que implicó una compleja coordinación en los trabajos.
Con la ubicación de este nuevo artefacto en la segunda unidad de generación, EPM apunta a poder encender el complejo antes del 30 de noviembre de este año, fecha límite fijada por la Creg por cuenta de las obligaciones de energía en firme adquiridas por la empresa.
A comienzos de este mes, otro hito importante registrado en el proyecto fue la instalación del rotor en la primera unidad de generación, en medio de un montaje que tardó más de seis meses y en el que participaron al menos 300 trabajadores.
Aunque en lo corrido de este año el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, le ha puesto varias fechas a la inauguración de la hidroeléctrica, EPM aún no ha dado un cronograma definitivo de cuando empezarían a funcionar las dos primeras unidades de generación.
Además de cumplir con los compromisos adquiridos con el sistema eléctrico nacional, dicha inauguración es una de las tareas más importantes para comenzar a reducir el riesgo en el que está sumido el proyecto tras el colapso de la Galería Auxiliar de Desviación hace cuatro años.
Tal como lo advirtió la firma Pöyry en su informe sobre la estabilidad de la hidroeléctrica, una de las más importantes prioridades es habilitar nuevas salidas para el agua del embalse y así reducir la presión sobre el vertedero.
Esta última estructura, que es la única salida del agua desde finales de 2018, genera preocupación entre los expertos ya que no fue diseñada para el paso continuo de la misma y podría erosionarse y comprometer eventualmente la estabilidad de la presa.
Según había anticipado el alcalde Quintero, para el próximo 26 de julio EPM tendría programado el inicio de pruebas secas en las dos primeras unidades de generación