“La recuperación va a tardar años”
Representante a la Cámara por San Andrés, Providencia y Santa Catalina habla de la destrucción tras el paso del huracán Iota y le pide al Gobierno nacional tomar decisiones concretas y compromiso para la reconstrucción.
¿Cuál es el panorama actual del archipiélago? ¿Hay un dato aproximado de los daños?
Hay imágenes sencillamente desgarradoras. El municipio de Providencia quedó destruido. Aunque solo se registra una víctima mortal, la magnitud en daños materiales es total. En la isla de San Andrés hubo alrededor de cien viviendas con los techos desprendidos y puede haber una afectación grandísima en el sector noroeste de la isla. Allí el mar se llevó gran parte de la vía y esa zona está incomunicada. Hay también colegios con los muros destruidos y cientos de árboles caídos, que están atravesados y tumbaron cables, así como decenas de postes en el suelo. Todo ello ha generado que el 60 % de la isla esté sin energía. Sin embargo, nada de esto se compara con el daño en Providencia. Sin dejar de lado San Andrés, donde he sido testigo de la fuerza de este huracán, allá la magnitud no tiene comparación con nada. Hablamos de más 1.200 viviendas totalmente destruidas. Veo las imágenes y digo “aquí estuvo el poder de Dios”, porque con la magnitud de la devastación solo hubo una persona fallecida.
Se sabía del huracán hace días y, aun así, se permitió la entrada de turistas. ¿Faltó preparación ahí? ¿No hubo una reacción consecuente con lo que se venía?
Desconozco el número de turistas que estaban en Providencia. Sé que la persona reportada como fallecida es un residente de la isla. El caso de haberles permitido entrar a los turistas creo que los puso en riesgo sin tener la necesidad. De hecho, Providencia estaba cerrado para el turismo hasta la primera semana de noviembre, cuando se ordenó la reapertura para reactivar la economía. No era prudente permitir el ingreso de turistas, porque era claro que el municipio sería más afectado que la isla de San Andrés.
Desde Presidencia se ha hablado de una reconstrucción en cien días en Providencia, pero uno ve que incluso en la isla todavía están las consecuencias de huracanes de hace más de una década. ¿Es viable ese plazo?
Hoy, después de ver estas imágenes, diría que la recuperación va a tardar años. El solo remover escombros y limpiar los lotes se puede demorar un año. Es que hay que ver que tendrá que hacerse de manera artesanal o con maquinaria pesada, y traerla a Providencia para remover más de mil viviendas es una labor titánica. Es una labor que va a tardar muchísimo tiempo. No solo hablamos de la reconstrucción sino en la organización, limpieza y retiro de todos los escombros que han quedado. En la limpieza será un año y en la reconstrucción de mil viviendas se invertirán dos o tres años.
¿La actual administración local tiene los elementos suficientes para dirigir esa reconstrucción?
No, por supuesto que no. Por eso aprovecho para hacerle un llamado al Gobierno nacional para que, más allá de anuncios, se tomen decisiones concretas en el compromiso y la reconstrucción. También llamo a la solidaridad del pueblo colombiano. Recordemos que el gobierno municipal depende de las transferencias que haga el departamento.
¿Qué es lo más urgente para atender en San Andrés y Providencia?
Lo más urgente es la ayuda humanitaria en cuanto a alimentos, vestido y agua. También se necesitan herramientas para la remoción de escombros y reconstrucción. Vamos a necesitar muchísimas carpas para que las familias pasen las noches. Esperamos que en las próximas horas tengamos más información, porque hemos estado incomunicados. Hasta las antenas fueron derribadas.
¿Cuál va a ser su papel en el Congreso ahora con esta tragedia?
Nuestra tarea es liderar ante el Gobierno ese plan de rescate para el archipiélago. Inicialmente habíamos pedido ese plan de rescate para solventar las consecuencias del COVID-19 en la economía de las islas. Hoy, ese plan de rescate debe enfocarse en la recuperación por el huracán y debe ser prioridad. Vamos a trabajar de manera incansable para concretar y hacer seguimiento a esta solución que necesitamos.
¿Las consecuencias del huracán se pueden enmarcar en ese olvido histórico en que han estado San Andrés, Providencia y Santa Catalina?
Las consecuencias de la tormenta Eta y del huracán desnudaron una realidad que desde hace un par de años hemos venido demandando del Gobierno. Aquí hay ausencia de alcantarillado pluvial. En San Andrés, en temporada de lluvias, hay zonas que se inundan y donde las aguas pueden alcanzar más de metro y medio. Esto es una deuda histórica que se tiene con el pueblo de las islas. Esto va sumado a la ausencia de programas de viviendas de interés social. Hay que hacer un recorrido por el verdadero departamento para mostrar la realidad social, más allá del turismo y la publicidad. La falta de programas sociales tiene a muchos viviendo en condiciones infrahumanas.
San Andrés es la punta de lanza de Colombia en el Caribe y ha sido algo que se ha descuidado.