Hacer una sucesión en Colombia
Si se quiere conocer cómo funciona la burocracia en Colombia, trate de ayudar a hacer personalmente una sucesión. Meses y años respondiendo en cada ventanilla las normas y los pedidos de todos los que intervienen. Bancos, instituciones financieras, empresas y otras entidades que tienen que expedir certificaciones, cada una con sus políticas y sus diferentes papeles para diligenciar y esperar respuestas. Después, los entes públicos con certificaciones de certificaciones, sellos, historias de los bienes, registros, colas, esperas de respuestas, correcciones, nuevas preguntas, nuevas respuestas y nuevas correcciones, y al fin, cuando cree que todo está a punto, la DIAN con sus propias normas, su propia lentitud y sus funcionarios impenetrables en tronos evasivos, que el Dr. no está, que está en revisión, que venga en ocho días. Hay que volver a corregir, volver a modificar declaraciones pasadas del difunto que la DIAN ya había revisado y aceptado, arreglar errores de pesos y centavos en una declaración de renta de hace diez o más años, recoger nuevos certificados actualizando fechas, registrando otra vez, corrigiendo documentos anteriores aceptados, en fin, esperar con paciencia meses y años en un ir y venir por ventanillas y antesalas interminables, esperar y esperar y seguir esperando. ¿Alguien podría arreglar esto? Es muy injusto con todos los ciudadanos que deben hacer estos trámites tan sensibles, pero más injusto aún con familias humildes que deben incurrir en numerosos gastos y en abogados que necesariamente deben utilizarse por las interpretaciones de unas normas confusas y difíciles. Quienes logran llegar al final de la sucesión son unos verdaderos héroes.
Marciano Puche Uribe.