Telas colombianas, sinónimo de calidad e innovación
El sector textil está a la vanguardia de las necesidades de las personas y el medio ambiente. Conozca la importancia de sus innovaciones.
La amplia producción de insumos, accesorios para la confección, nuevos desarrollos en tejidos de fibras naturales y elásticas, además de empresas con gran capacidad de producción, innovación e integración vertical hacen de Colombia una plataforma ideal para el proceso de confección.
El país está en capacidad de ofrecer un alto contenido de diseño, estampación y acabados. Hoy se fabrican productos en fibras naturales y sintéticas como seda, rayón, poliamidas, elastanos y poliéster especial, entre otras, que incluyen diseños diferenciados, con técnicas de estampación por sublimación y digital.
Según Invest in Colombia, la industria de la moda colombiana representa el 9,4 % del total del PIB industrial y emplea alrededor de 600.000 personas.
“En 2020, las exportaciones de moda llegaron a US$680,6 millones, donde los principales países compradores fueron Estados Unidos, Ecuador, México, Perú, Costa Rica, Brasil y Chile. Mientras que los departamentos que más vendieron moda en el exterior fueron Antioquia, Bogotá, Valle del Cauca, Atlántico, Cundinamarca, Santander, Risaralda, Norte de Santander y Caldas”, informó Procolombia.
Las prendas más demandadas en el exterior fueron telas y tejidos, fajas y ropa de control, jeans, ropa interior femenina y manufacturas de cuero.
Telas a la vanguardia
Las telas colombianas se han ganado un espacio especial por su calidad; además, porque han logrado estar a la vanguardia de las necesidades de los clientes y del medio ambiente.
La empresa textil colombiana Lafayette, por ejemplo, asegura que permanentemente están en una búsqueda de transformación, siempre dinámicos y al desarrollo de la tecnología. Por lo tanto, elaboran sus telas con tecnología de punta para estar a la vanguardia de las últimas tendencias en materiales, texturas, estampados y acabados funcionales para sus mercados, logrando tener un amplio portafolio de telas inteligentes que suplen las necesidades de los usuarios.
Pero ¿a qué se refieren cuando hablan de telas inteligentes y por qué son una tendencia creciente? Según la diseñadora de modas Tatiana Castaño, “las telas son todo un universo gracias a su amplia oferta de colores, texturas y funciones”.
“Y, conociendo la importancia de proteger el medio ambiente y procurando que con nuestras profesiones y creaciones no afectemos a los demás, el sector textil, incluyendo las telas, cada día busca nuevas formas para ser más sostenibles, logrando productos que, desde la plantación de sus fibras hasta su elaboración, respetan el medio ambiente”, asegura Castaño.
Textiles con filtro UV, antibacteriales, biodegradables o repelentes, entre otras cualidades, son algunas de las ofertas de telas inteligentes que hay en el mercado y cada día cobran más importancia.
“Sabemos que es algo que les importa mucho a los clientes. En mi marca, Castaño Beachware, por ejemplo, además de que refuerzo los temas de sostenibilidad por medio del concepto de la colección, procuro que las telas no solo funcionen para la técnica de estampación que uso, sino que, además de su belleza, resalten por su calidad. La idea es seguir innovando y lograr usar telas más ecológicas. Es un proceso que nos compromete a todos”, dice la diseñadora.
Las telas ecológicas pueden ser confeccionadas con algodón orgánico, tela reciclada de botellas PET, ecopoliéster u otro material como madera, lino, piña, bambú, algas marinas o retal sobrante de las mesas de corte, entre otros materiales.