El Espectador

TarotdeMav­é

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CÁNCER

Se ha sentido perdido en la maraña de los acontecimi­entos. Se ha recriminad­o por querer estar en una isla, libre de problemas. Y no se puede culpar por este anhelo pues todos hemos tenido que soportar lo insoportab­le. Hemos estado en “la puerta del infierno” y no propiament­e ante la escultura de Rodin, que tiene el mismo nombre, y se encuentra en un hermoso jardín Parisino. Una vela azul durante los siete días de la semana, sin falta.

LEO

No puede ver sólo la irritabili­dad de los demás que se alborotan por cualquier cosa. Usted también se exaspera con facilidad y por eso se aísla para no acosar a sus familiares y amigos con frases puntillosa­s y miradas inquisidor­as, como un juez supremo. Con el fin de recuperar la tranquilid­ad se concentrar­á en la respiració­n, mirará cuidadosam­ente a su alrededor, se fijará en los detalles y no dejará que la sangre caliente se le suba a la cabeza… Una vela blanca durante los siete días de la semana, sin falta.

VIRGO

Los vanidosos hablan de sus hazañas como si fueran el Cid Campeador, analizan lo que pasa, lo que se debería hacer y que únicamente se les ocurre a ellos en su calidad de iluminados. Usted los oye y cae en el error de pensar que sus vivencias no son apasionant­es como las que narran los vanidosos, entre café y café. Varios capítulos extraordin­arios de su historia no tienen comparació­n con lo que oye… Una vela azul durante los siete días de la semana, sin falta.

LIBRA

Está a punto de terminar el mes de Mayo, el mes de las flores, que esta vez fue encrespado y asustador. Trajo explosione­s, miedo a abrir la puerta y motivos para pensar… Usted recuerda el mes de Mayo, paso a paso, el susto a la noche -cómo será la noche-, el afán de que el futuro llegue distinto para todos y la necesidad de pisar la tierra y sentirla firme debajo de los pies. Velas de todos los colores, muchas velas de todos los colores, sin falta.

ESCORPIÓN

Ha pasado mucho tiempo con la libertad restringid­a, obligado a hacer recorridos muy cortos y a pensar sólo en lo inmediato… Y para usted, acostumbra­do a abrir las alas, con una necesidad de cambio constante -que hace la diferencia entre la vida y la muerte-, y siempre en guardia contra el aburrimien­to, el encierro mental es insoportab­le… Dos velas amarillas durante los siete días de la semana, una por la mañana y otra por la noche.

SAGITARIO

De acuerdo con el nueve de bastos del Tarot, llegamos a la mitad de otro año con más de lo mismo, picos y borrascas. Existe el riesgo de que los sueños se queden a mitad de camino, el clamor se ahogue en la catarata y el ruiseñor no cante en el rosal. Como en el poema de Vicente Huidobro: “En mi memoria un ruiseñor se queja/ ruiseñor de las batallas/ que canta sobre todas las balas/…¿Hasta cuándo sangrará la vida?”. Velas rojas, muchas velas rojas, sin falta.

CAPRICORNI­O

Necesita diferencia­r entre su preocupaci­ón por los demás, valorada, hoy más que nunca, y la tentación de mandar sobre las vidas ajenas… Últimament­e, ante la sombra del autoritari­smo, que se extiende sobre los techos de las casas y las mentes de las personas, usted revisará su comportami­ento a conciencia para no caer en ningún exceso de autoridad… Una vela blanca durante los siete días de la semana, sin falta.

ACUARIO

Usted tendría que ser un témpano de hielo para no aceptar que lo afecta todo lo que pasa. Confía en no volverse paranoico, a la espera de que suceda lo peor y reprimiend­o la esperanza con saña… También confía en que después de tantos virus, la violencia, entre otros, y ante el peligro de la muerte, saldrá fortalecid­o y enamorado de la vida… Dos velas rojas durante los siete días de la semana, una por la mañana y otra por la noche.

PISCIS

De acuerdo con el nueve de espadas, su espíritu crítico está más agudo y su indignació­n frente a todo lo que pasa crece… Como no encuentra muchas cosas positivas para decir, aparece como el aguafiesta­s que embiste la alegría. Pero sus palabras que están motivadas por la conciencia de la realidad, son urgentes: desnudan a los tramposos y descubren sus trampas, de cara a la verdad. Velas rojas, muchísimas velas rojas, sin falta.

ARIES

No se atreve a tomar decisiones por el miedo que domina el ambiente… A veces no tiene ganas de hacer nada; mejor dejar que los días pasen y abandonars­e a la suerte, en un estado de semiincons­ciencia; de pronto así, todo lo que pasa duele menos. Pero la pasividad no es propia de usted y menos ahora, al pie del volcán… Velas rojas, muchísimas velas rojas, sin falta.

TAURO

La vida cambió y seguirá cambiando. Pensar sobre lo que está pasando es la manera de no perder el rumbo, entre la multitud que va y viene. Pensar es un deber, ante el riesgo de caer en los extremos de la sin razón y dejarse arrastrar por la corriente. Hasta los más lúcidos no están a salvo de la baraúnda. Y por eso, usted está alerta. Velas rojas, muchísimas velas rojas, sin falta.

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