La migración en Nariño
En municipios como Ipiales y Pasto las autoridades se encuentran en alerta ante el aumento de migrantes provenientes de Haití y Cuba, que han entrado por trochas ilegales desde Ecuador, con el propósito de llegar al Urabá y seguir por el Darién hacia Panamá. Cientos de personas se encuentran varadas a la espera de continuar con su travesía. Desde la Gobernación piden medidas inmediatas para atender la crisis.
El gobernador de Nariño explica que lo que hace atractiva esta zona específica del departamento para los grupos armados ilegales es, sobre todo, su ubicación geográfica. “Tiene límites con el Cauca y los grupos armados también están muy presentes en ese departamento. Además hay dos ríos claves, que son el Telembí y el Patía, que llegan muy fácil al Pacífico y ahí están las rutas del narcotráfico. Son sitios muy estratégicos para estas organizaciones, que tienen como principal economía el tráfico de sustancias psicoactivas”, sostiene Rojas.
Sobre los cultivos ilícitos y el futuro de la aspersión con glifosato en el departamento, el mandatario explica que por ahora hay un fallo de tutela que protege a los territorios indígenas y a las comunidades afros, donde no puede haber aspersión aérea: “Cuando hay sustitución voluntaria, es muchísimo menor y no afecta la vida y el medio ambiente. Nariño ya ha vivido los estragos del glifosato y ha tenido dificultades. Las cosas a la fuerza, sin ningún diálogo, lo que hacen es que haya más resiembra de cultivos de coca porque no hay alternativas”.
‘‘Queremos que Nariño esté libre de coca, pero para eso necesitamos programas sociales”.