Con pandemia y todo, Presto llega a los 40 años
Pocas empresas tienen motivos para celebrar tras los cierres y tropiezos que ocasionó la pandemia de COVID-19. Sin embargo, hay una marca para la que este 2021 tiene un aspecto diferente. Más maduro, si se quiere. Se trata de Presto, una cadena pionera en el sector de hamburguesas en Colombia, que cumplió cuarenta años este mes.
Como la propia marca lo describe, su “crisis de los cuarenta” llegó con el coronavirus, pero esta coyuntura fue el empujón que necesitaba para afianzar los canales digitales que desarrollaron años atrás, rediseñar su estrategia de domicilios y, como tantos otros negocios, resistir.
Hoy Presto está más sólida que nunca. A pesar de la pandemia, reporta ventas anuales por $139.000 millones y genera más de 700 empleos directos en más de 150 puntos de venta, que están ubicados en 24 ciudades.
Para su aniversario cuarenta, la marca lanzó por tiempo limitado cuatro ediciones especiales: dos tipos de hamburguesas llamadas “las cuarentonas” y dos tipos de perros calientes, que son “los cuarentones”.
A propósito de esta celebración, El Espectador habló con Marlon Masis, CEO de Mesofoods, dueña de la marca desde 2015.
¿Cuál es la historia de Presto?
Desde su génesis ha sido una marca muy innovadora, siendo la primera hamburguesa que tuvo Colombia. El Grupo Santo Domingo abrió Presto; posteriormente, a finales de 2014 y principios de 2015 nosotros adquirimos la marca, tanto a los franquiciados como al Grupo Santo Domingo, volviéndonos 100 % operadores del sistema.
Es una marca que sigue estando a la vanguardia de iniciativas en la categoría. Fuimos la primera en tener hamburguesas plant based, que son las Beyond Meat, y los primeros que nos atrevimos a meterle una empanada a una hamburguesa; esos son algunos ejemplos muy particulares que denotan nuestra capacidad de innovación.
¿Tiene idea de por qué se llama así?
Presto significa “pronto”, estar listo. Realmente la historia no la sé, me encantaría tenerla. Asumo que, en aquel entonces, siendo un país que no estaba expuesto a las hamburguesas, a la comida rápida, “presto” significaba que llegabas y ya estaba tu hamburguesa lista.
¿De dónde cree que viene el cariño de la gente por la marca?
Yo creo que Presto es una hamburguesa de Colombia. Tiene la esencia, el sabor, la sazón del país. Yo creo que el colombiano valora muchísimo el sabor local, la comida bien hecha, no la comida congelada para hacer. Todos los ingredientes son frescos y usamos recetas en las que están impregnados esos sabores colombianos. Eso es lo que ha creado esa conexión emocional que tiene el mercado con la marca.
En esa línea, ¿cuántos ingredientes de Presto son colombianos?
Puedo asegurar que el 100 % de los ingredientes son colombianos. Lo único que estamos importando es la Beyond Meat. También tenemos nuestra propia planta cárnica, lo que da la garantía de que la carne es 100 % nacional y es procesada por manos colombianas. Por eso podemos darnos el lujo de decir que tenemos una carne artesanal.
¿Cuál es el secreto para mantenerse por tantos años en un segmento tan competido?
Yo creo que Presto ha hablado los idiomas de las diferentes generaciones. Los sabores cambian en el tiempo. La capacidad de la organización de hablar, de verse y de saber cómo se tiene que actuar en cada momento es lo que nos ha llevado a ser una compañía exitosa durante cuarenta años.
¿Qué retos llegaron para ustedes con la pandemia?
El reto fue mantenernos en un escenario en el que nos cerraron, no podíamos vender y los que nos proveían de materias primas no nos podían proveer. Sin embargo, en 2019 le dimos mucha fuerza a la parte del servicio a domicilio y de plataformas de agregadores; entonces cuando entramos a la pandemia, ya estábamos preparados en la parte del servicio a domicilio. En la pandemia, el 75 % de los ingresos de la compañía fueron por servicio a domicilio y estuvimos trabajando con siete plataformas de agregadores. La parte tecnológica la teníamos muy desarrollada. Evidentemente, como cualquier otra compañía que pasó por la pandemia, esta nos limitó porque perdimos la tracción de las ventas de salón. Pero fue bien interesante toda la preparación que logramos hacer prepandemia, que, sin duda, nos ayudó un montón.
¿Pudieron conservar los empleos?
Me encantaría decir que nosotros mantuvimos el 100 % de la compañía, pero esa no fue la realidad. La pandemia sí nos deterioró en puntos de venta, perdimos puntos porque los dueños de los locales estaban negados a negociar y tuvimos otros que el Gobierno rotundamente no nos dejó abrir. Con una facturación de cero pesos, era muy complicado pagar un arriendo durante seis o siete meses. En los puntos de venta tuvimos que hacer renuncias con el objetivo de tratar de salvar la mayor cantidad de empleos a nivel nacional.
¿Qué planes tienen para los cuarenta años de Presto?
Venimos con unos productos fuera de serie que ya pueden degustar en nuestros restaurantes. Son cuatro productos conmemorativos con sabores bien particulares y unas recetas muy buenas, lideradas por nuestro equipo de innovación. Creo que vamos a dar una sonrisa en cada mordisco de estos productos. También estamos mejorando el modelo operativo y haciendo un par de pilotos en algunos restaurantes, porque queremos lanzar un nuevo sistema. Así vamos a tener mejores tiempos de servicio. Ese será nuestro enfoque en 2022. Y, sin duda, siempre tendremos planes de abrir nuevos puntos de venta. Creo que tenemos un enfoque muy claro en este momento.