El Espectador

Primer logro

- LA COLUMNA DE PELÁEZ HERNÁN PELÁEZ R.

Había que ganarle a Bolivia en esta corta serie de dos fechas para conservar las esperanzas de clasificac­ión al Mundial. Ese primer objetivo o logro se consiguió con un esquema, sobre todo en la etapa inicial, decididame­nte ofensivo. Poner en los costados a extremos veloces y recursivos fue el primer paso, donde Luis Díaz, la figura por su gol y su asistencia a Borja, y Luis Sinisterra, menos integrado al juego, ofrecieron salida apoyados sobre todo por Fabra, en la función más conocida en él. Puede tener déficit defensivo, aunque sabe cómo y cuándo pasar por su zona hasta la línea del fondo. Y eso se aplicó a conciencia, pues para nadie era un secreto el operativo de los bolivianos, con una formación joven y entusiasta, sin agallas para visitar el arco de Ospina.

Quizá contra Venezuela no resulte eficaz la fórmula, por la clase de rival. Ahora bien, es preciso destacar también el poder jugar con un solo volante de marca o recuperaci­ón, como resultó el caso de Cuéllar, mientras James y Cuadrado, sobre todo el primero, ensayó una y otra vez pases dirigidos al sector de Díaz.

Desde el comienzo la selección asumió la obligación de ser la protagonis­ta del partido y fue simplement­e esperar con paciencia la llegada del primer gol, a sabiendas de que Bolivia no renunciarí­a a su plan conservado­r de esperar y nada más.

Muchos se pueden preguntar a quién se le ganó. La respuesta es sencilla: a un adversario timorato, resignado a su papel de comodín, lo cual comprometí­a el mismo ejercicio de la selección de Colombia, que no solamente debía ganar, sino sacudir esa apatía goleadora, que venía siendo su compañera en los últimos partidos. Es probable que haya sido tardía la reacción nacional, mirando la tabla de posiciones, en la que Perú es nuestro rival. Los cuatro de arriba están asegurados. Para conseguir el boleto para ir a repechaje, Colombia debería ganar y esperar que Perú empate en casa o pierda contra Paraguay.

Más allá de esos garabatos matemático­s, es preciso ganar cuando se visite a Venezuela. Es recurrente en nuestro medio dejar todo para última hora, sea pago de servicios, impuestos, etc. La selección en ese aspecto es el reflejo de la sociedad en la cual vivimos. Todo se lo jugó en las dos jornadas finales. Estamos igual a los jugadores de cartas o apostadore­s, quienes llegado el momento, casi con despecho, lanzan lo único que les queda, sea plata u orgullo.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia