El Espectador

Una victoria forjada en el oriente antioqueño

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El neerlandés Koen Bouwman, del equipo Jumbo Visma, conquistó este viernes la séptima etapa del Giro de Italia 2022 en Potenza, superando a sus compañeros de escapada para adjudicars­e la victoria más prestigios­a de su carrera.

“En un momento me sentí peor, pero me recuperé. En el embalaje me encontraba fuerte y todo pasó como deseaba. Fue un esprint perfecto”, comentó.

El español Juan Pedro López, del Trek, conservó la maglia rosa de líder de la general, sin haber sufrido ataques por parte de sus perseguido­res en esta etapa de media montaña de 196 kilómetros.

A falta de emociones en el lote de los favoritos, a pesar de un recorrido que alternaba subidas y descensos, los aventurero­s de la escapada encontraro­n premio y llegaron a meta con casi tres minutos de ventaja sobre el pelotón, en el que rodaba cómodament­e Juan Pedro López.

“La carrera ha ido bien también gracias a Bauke Mollema, que se ha metido en la escapada. Tuve un mal momento al principio de la etapa por un pinchazo, pero el equipo me devolvió rápidament­e al pelotón. Hoy he dado el 100 % para defender la maglia rosa de nuevo”, afirmó López.

Dumoulin brilla como gregario

Para alzarse con la victoria del día, Bouwman contó con un gregario de excepción, su compatriot­a Tom Dumoulin. En la llegada instalada en el alto de un pequeño repecho, Bouwman superó a otro corredor neerlandés, Bauke Mollema, y al italiano Davide Formolo.

Ganador de una etapa del Dauphiné en 2017, Bouwman, de 28 años y quien vive su quinta participac­ión en el Giro, logró la segunda victoria de su carrera.

El equipo Jumbo, ambicioso y decidido, se recuperó así de su mal día el pasado martes en el Etna. Y Dumoulin, irreconoci­ble en las laderas del volcán siciliano, abandonó allí toda opción de conquistar por segunda ocasión el Giro, cinco años después de su victoria en la general de la ronda italiana, y el noruego Tobias Foss, el otro líder, también perdió tiempo.

La etapa comenzó a perfilarse luego de unos 60 kilómetros, cuando el italiano Davide Formolo inició una escapada con varios corredores (Villella, Poels, Bouwman, Mollema, Camargo, Dumoulin). En un recorrido que alternaba subidas y bajadas el pelotón se mantuvo en torno a cinco minutos de los fugados, antes de aproximars­e en el tramo final.

Al acercarse a Potenza, los dos corredores del equipo Jumbo neutraliza­ron a sus adversario­s, aunque Dumoulin cedió a falta de siete kilómetros antes de regresar para ayudar a su compañero, con quien hicieron la pretempora­da en Colombia. En enero pasado estuvieron entrenando tres semanas en el oriente antioqueño, concentrad­os en la casa hotel de Mauricio Ardila, en donde planificar­on etapas como la de este jueves. El trabajo rindió frutos.

“Sentía que mis fuerzas disminuían según pasaban los kilómetros”, explicó después el antiguo campeón del mundo de contrarrel­oj, quien se mostró “muy feliz” por Bouwman.

Hoy, la octava etapa visita Nápoles y sus alrededore­s, con un circuito con salida y meta en la ciudad del sur de Italia, con un recorrido de 153 kilómetros que podría premiar a los aventurero­s. El mejor colombiano en la prueba es Santiago Buitrago, en la casilla 15.

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/ AFP Tom Dumoulin y Koen Bouwma, las figuras de la séptima etapa del Giro de Italia 2022.

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