Alejandro Gaviria: el recorrido y los retos del próximo ministro de Educación
Al ingeniero y economista se le avecinan varios retos al frente de la cartera de Educación, como lograr acceso a la educación para los más pequeños, mitigar los daños que dejó la pandemia y superar las brechas regionales.
El presidente electo, Gustavo Petro, anunció ayer que el exministro de Salud y exrector de la Universidad de los Andes, Alejandro Gaviria, será el próximo ministro de Educación. Y las primeras reacciones al nombramiento por parte de líderes y expertos del sector educativo han sido mixtas.
Mientras que educadores como Julián de Zubiría, investigador del sector, y Sandra García, PhD. en política social de la Universidad de Columbia (Estados Unidos ) y profesora de la Escuela de Gobierno de los Andes, celebraron la decisión, representantes de la Federación de Estudiantes Universitarios de Colombia manifestaron estar “decepcionados” por la designación. Por su parte, Daniel Torres, impulsor de cuatro leyes por los deudores del Icetex y parte de la organización Icetex Te Arruina, le dijo a El Espectador que “Alejandro Gaviria será un ministro de Educación muy sensible a las injusticias que ocurren en el sector educativo, convencido de que la educación en todos los niveles es un derecho y con una extraordinaria capacidad intelectual que garantizará que sus decisiones sean apuestas correctas para el futuro de la educación en Colombia”.
En algo que coinciden quienes celebraron y criticaron el nombramiento es que el próximo ministro enfrentará varios desafíos en su gestión. Algunos de estos, según los expertos consultados por este diario, son enfrentar la promesa de la educación superior gratuita, lograr el acceso educativo para los más pequeños, superar las brechas regionales, reparar lo que dejó la pandemia, entre otros.
Para Salomé Burbano, investigadora del Centro de Pensamiento en Políticas Públicas de Educación Superior de la Universidad Nacional, de hecho, el gran reto será fortalecer económicamente el sistema público universitario, “en aras de lograr la tan anhelada gratuidad y el acceso por medio de la financiación de la oferta y no de la demanda”. Pero para María José Murillo Zapata, responsable de la secretaría de educación de la Federación
de Estudiantes Universitarios de Colombia, lo que ha propuesto Gaviria sobre la financiación a la educación superior no es suficiente. “La crisis que atraviesan las universidades es profunda y el debate de los cambios no solo se puede limitar a lo financiero”, explicó.
Por otra parte, Fecode y De Zubiría resaltan que un tema prioritario para el próximo ministro es “garantizar el derecho a la educación de los niños menores de seis años. “A ellos les hemos violado el derecho establecido en la Ley General y estamos muy atrás de América Latina”, advirtió De Zubiría.
Pero este no es el único problema que enfrentan los niños y las niñas en su educación. La pandemia impidió que los estudiantes asistieran presencialmente a su colegio por más de dos años, lo que no solo implicó desafíos académicos y emocionales, sino que llevó a que muchos dejaran de recibir educación completamente, pues no tenían acceso a la virtualidad. Por esto, uno de los temas prioritarios del próximo gobierno será cómo mitigar esos daños.
“Asociado a la pandemia, se agudizó bastante el tema de salud emocional y bienestar socioemocional. Es uno de los retos más grandes que está enfrentando el sistema educativo en este momento. Se necesitará alguna estrategia intersectorial para atender este reto y acompañar a los docentes y a los directivos docentes en esa labor”, indicó García.
La trayectoria del nuevo ministro
Meses después de haber estado él en la carrera presidencial, como precandidato de la Coalición Centro Esperanza, Gaviria anunció su apoyo a Gustavo Petro días después de la votación de primera vuelta y dijo que el ahora presidente “representa la opción de cambio más responsable institucional y liberal”. Sin embargo, le pidió reconsiderar algunos aspectos de sus propuestas en economía y salud.
Tras la elección presidencial, Gaviria fue nombrado como encargado del empalme en el sector de la educación, una tarea en la que ha estado acompañado por más de 20 personas.
Gaviria, nacido en Santiago de Chile, estudió ingeniería civil en la Escuela de Ingeniería de Antioquia (EIA) y desarrolló sus estudios de maestría y doctorado en economía en las universidades los Andes y la de California (EE. UU.), respectivamente.
El exministro cuenta con una amplia trayectoria, la cual ha alternado entre el sector público y el privado, desempeñándose, principalmente, como economista. Después de ejercer como investigador en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y como subdirector de Fedesarrollo y del Departamento Nacional de Planeación (DNP), Gaviria llegó a la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes en 2004, donde se desempeñó como profesor y, posteriormente, como su decano. Tras este paso por su alma máter, regresó al sector público como ministro de Salud del gobierno de Juan Manuel Santos, cargo en el que estuvo entre 2012 y 2018.
Como contamos hace unos años, aunque Gaviria recibió varias críticas al inicio de su gestión, poco a poco se convirtió en uno de los ministros con más aceptación. Su constante búsqueda por lograr un sistema de salud sostenible lo llevó a liderar medidas que generaron disgustos en varios sectores, pero que recibieron elogios desde otros.
Después de dirigir la cartera de Salud regresó a los Andes para hacerse cargo del Centro de Objetivos de Desarrollo Sostenible (CODS) para América Latina y el Caribe. Tras un corto paso por ahí, en mayo de 2019 asumió el cargo de rector de esta universidad. En este puesto debió enfrentar momentos críticos para el país, como el paro nacional en noviembre de ese mismo año, donde los estudiantes universitarios tuvieron una amplia movilización, y la pandemia por covid-19, que comenzó en marzo de 2020. Estuvo en la rectoría hasta agosto de 2021, cuando anunció su precandidatura presidencial.
››Garantizar
el derecho a la educación de los niños menores de seis años será un tema prioritario para el siguiente ministro, así como mitigar los efectos de la pandemia en esta población.