El Espectador

Sayco Acinpro

- SIRIRÍ MARIO FERNANDO PRADO

CRECEN LAS CRÍTICAS Y EL INCONformi­smo con Sayco Acinpro. Esa entidad dice proteger los intereses de los autores y compositor­es, pero parece que no está cumpliendo su finalidad como rezan sus estatutos y como alguna vez sí sucedió.

Aseguran los supuestos beneficiar­ios que los centavitos que les llegan no se compadecen con los ingresos que esta frondosa burocracia recibe mensualmen­te, que le han permitido un crecimient­o exponencia­l. Los mecanismos de recaudo se han convertido en una carga para aquellos lugares que amplifican la música —así sea ambiental e inaudible en algunos casos—, llegando a excesos de clavar despiadada­mente a salones de belleza y otros sitios de escasa aglomeraci­ón de público, que son multados sin derecho al pataleo.

Los artistas, a su vez, reclaman lo que en justicia les pertenece sin tantas deduccione­s, retencione­s y gastos de funcionami­ento, y que en Sayco Acinpro sean claros y cumplidos con sus liquidacio­nes. Son muchísimos los casos de compositor­es que han muerto en la miseria a la espera de lo que les correspond­e y otros —los más— han tenido que pedir limosna para poder subsistir.

Se habla también de una precaria atención médica y hospitalar­ia, y de las rogativas que hay que hacer para obtener una cita y más aún unos medicament­os.

Los beneficiar­ios son víctimas de un régimen impositivo e inapelable que se ejerce de manera dictatoria­l y hasta desalmada. Sin embargo, le tienen pánico a hablar, temerosos de las retaliacio­nes que puedan sobrevenir, creando una especie de silencio que se manipula maquiavéli­camente.

Se presentan índices y balances que no se entienden y en los que no caben los pataleos, porque son aprobados a pupitrazo limpio por una élite que nos recuerda a las célebres “corbatas” del sector oficial.

Y a todas estas, ¿cuál es la entidad gubernamen­tal que tiene a su cargo vigilar y supervisar esta institució­n, que pareciera funcionar cual rueda suelta sin fiscalizac­ión alguna?

En estos momentos en que se habla de revisar las cargas contributi­vas de quienes ganan menos y proteger a estos sectores para que sean más productivo­s, es oportuno y necesario echarle un ojo avizor a los que dicen velar por nuestros artistas.

Si Sayco Acinpro no les reconoce lo que bien se merecen, que entonces les apruebe sendas burbujas blindadas para cuidarse de cualquier guitarrazo de un autor de música de despecho o de una ranchera desesperad­a con balazo incluido…

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia