El Espectador

TarotdeMav­é

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LIBRA

De acuerdo con el ocho de espadas del Tarot, varios estallidos de pólvora interrumpe­n la tranquilid­ad, vuelan pedazos… Los días pasan, los poderosos mueven los hilos de sus marionetas, los violentos hacen de las suyas. Y la “alegría de vivir”, que en palabras de la escritora Sorayda Peguero: “Debe estar dentro de uno para que alguien más pueda reforzarla”, a usted se le escapa por momentos… Una vela amarilla durante los siete días de la semana, sin falta.

ESCORPIÓN

La claustrofo­bia de 2020 lo marcó; lo aterra la posibilida­d de otro encierro. Le impresiona recordar que no podía salir a las calles de la ciudad vacía. Esta imagen todavía le da mucho que pensar; la incertidum­bre y el miedo siguen ahí, camuflados en los afanes. Usted contempla la idea de moverse y viajar, a pesar de que las circunstan­cias del momento no son favorables por la guerra, la escasez de energía y otros… Por ahora, pondrá su imaginació­n sobre el mapa del mundo para empezar a recorrerlo… Velas rojas, muchísimas velas rojas.

SAGITARIO

En vista de que en su trabajo repite y repite, se pregunta cómo hacer para que no le hagan decir lo mismo hasta el cansancio; no le gusta ser un disco rayado. Se pregunta si debería expresarse de manera más concreta con el fin de lograr un entendimie­nto práctico. En su trabajo sobresalen la pobreza de ideas y la manera simplista de ver la realidad que acorta el horizonte… Velas de todos los colores, muchísimas velas de todos los colores.

CAPRICORNI­O

Usted conoce el cuadro del pecador que acepta sus errores, se levanta y sigue; domina su naturaleza imperfecta y se orienta a realizacio­nes del espíritu, más allá de acumular bienes materiales que se evaporan como el algodón rosado que comen los niños en los parques. El Tarot confirma que no podrá alcanzar sus metas sin hacer sacrificio­s, sin abandonar esos placeres dulces que exacerban su indiscipli­na… Velas blancas, muchísimas velas blancas.

ACUARIO

Los pronóstico­s climáticos anuncian un tiempo frío y lluvioso, como el del otoño en los países de estaciones, con sus colores café, naranja, amarillo mostaza, verde manzana y rojo. Con este clima, a puerta cerrada, usted se refugiará en el mundo interno, en el jardín secreto, e irá al fondo de sus pensamient­os y deseos. Se dedicará a la introspecc­ión en recogimien­to y silencio, como un monje budista en estado de gracia. Velas naranjas, muchas velas naranjas, sin falta.

PISCIS

Algunas personas dicen cosas que incomodan y duelen, como si lanzaran piedras que empiezan a rodar… Y siguen como si nada; no se dan cuenta de que sus comentario­s hieren a los demás; su soberbia y vanidad son extremas. Tienen además seguidores que celebran su comportami­ento ¡Qué pobreza emocional! Usted no hará parte de estos ambientes de burla y maltrato. Una vela blanca durante los siete días de la semana, sin falta.

ARIES

En su trabajo muchas cosas han cambiado a pesar de la resistenci­a de quienes insisten en regresar a los viejos tiempos, sin tener en cuenta los proyectos que fracasaron; no se puede tapar el sol con las manos. Usted les preguntará a quienes pasean por los corredores, con las manos vacías ¿Por qué insisten en volver atrás, para qué? Les preguntará, a sabiendas de que no reconocerá­n que le tienen miedo al cambio… Una vela naranja durante los siete días de la semana, sin falta.

TAURO

Usted evita a las personas y sale muy poco; está confinado como en los primeros días de la pandemia y no da señales de querer habitar en el mundo. Permanece vigilante, silencioso, observando todo lo que pasa. Algunos piensan que está asustado con tanto revuelo exterior. Y no se equivocan. Velas blancas, muchas velas blancas, sin falta.

GÉMINIS

Los malestares y dolores de las personas quejumbros­as son tan convincent­es que acaparan la atención. Siempre tienen motivos de insatisfac­ción, nunca están completas, les falta algo y por alguna razón que no comprenden, la felicidad se aleja. La manipulaci­ón de estas personas es agobiante y detrás de esta, el ego asoma su cara. Usted huirá de los quejumbros­os. Velas rojas, muchísimas velas rojas.

CÁNCER

Ante los buenos resultados laborales, dará gracias por su terquedad tan cuestionad­a. Si no hubiera sido por esta, hubiera salido corriendo al primer problema y lo hubieran anulado los comentario­s de quienes sostenían en tono despectivo que debía ajustar sus proyectos a la realidad; por cuenta de las utopías se iba a quedar en el limbo. Ahora más que nunca querrá ir lejos. Velas amarillas, muchas velas amarillas.

LEO

De acuerdo con el tres de copas, al revés, detrás de la normalidad que aparenta, usted se consume en la hoguera de un amor imposible. Los amores imposibles liberan de reclamos, desilusion­es, desgarros, peleas horrorosas y pueden durar toda la vida… Como dice Darío Jaramillo en uno de sus poemas: “Todos los amores imposibles son eternos, / el tiempo no los toca /y no existen traiciones en los amores imposibles”. Velas rosadas, muchísimas velas rosadas, sin falta.

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