Jamie Vardy, una historia de superación y éxito
El inglés Jamie Vardy es la ‘joya de la corona’ en Leicester. Sus 22 goles lo han convertido en uno de los delanteros más letales esta temporada. Pero la carrera de Vardy no ha sido un ‘cuento de hadas’. El ariete del Leicester, que creció en un entorno violento, se crió deportivamente en el Sheffield Wednesday. Con 16 años sufrió uno de los grandes golpes de su carrera. Pese a ser el gran goleador del equipo, la directiva decidía rescindirle el contrato... ¡por bajito! Tan duro fue el golpe que decidió dejar el fútbol. Una noche, se vio envuelto en una pelea en un bar y condenado por asalto, por lo que se iba a ver obligado a llevar una tobillera electrónica para ser localizado en todo momento. Una temporada después, el ‘gusanillo’ del fútbol le volvió a picar. El Stocksbridge Park Steels, de la octava división inglesa, se hacía con sus servicios. Ahí volvió a despertar ese instinto goleador, anotando 66 goles. En el 2010 fichó por el Halifax Town, de la séptima inglesa, colaborando con sus goles —29 en total— en el ascenso a la sexta división. Un año después firmó por el Fleetwood Town, de la quinta categoría. Su crecimiento subía como la espuma. En solo una temporada iba a anotar 31 goles para llevar a su equipo a la cuarta división. En 2012, el Leicester, de la segunda división, se iba a hacer con sus servicios. Tras un primer año de adaptación, en el que solo anotó cinco goles en 29 partidos, llegó el gran momento de Vardy. En la temporada 2013/2014, el inglés se convertiría en la gran referencia ofensiva del Leicester, aportando 16 goles en la campaña del ascenso a la ‘Premier League’. Hoy, con 22 goles, es no solo figura del Leicester y de la selección inglesa, sino uno de los grandes delanteros del mundo. Y todo ese crecimiento lo vivió en tan solo cuatro años. Una historia de película.