Ejemplo a otras ciudades
Los mejores proyectos siempre son el resultado del trabajo arduo, constante y colaborativo. Nada es más enriquecedor, para promover el desarrollo social y económico de las regiones, que el aporte de diferentes sectores y desde diversos campos. Esta es la clave para convertir nuestras ciudades en lugares más prósperos, sostenibles e incluyentes.
En Santa Marta, por ejemplo, ya se tomó la iniciativa de unir esfuerzos para implementar acciones contundentes y restablecer la relación sostenible de la ciudad con su entorno natural, su cultura y su diversidad poblacional. Este es un proyecto que, bajo el liderazgo, la credibilidad y el carisma de Carlos Vives, está transformando la ciudad en un territorio inteligente.
El artista samario, acompañado por su esposa Claudia Elena Vásquez, se ha metido de lleno, aprovechando la inmensa popularidad y el reconocimiento que tiene ante la dirigencia política, empresarial y cultural de Colombia, en esta iniciativa que él ha denominado ‘Tras la perla de la América’.
Convencidos de que el éxito de las buenas ejecuciones se fundamenta en la planeación, el acompañamiento y el trabajo en equipo, el pasado 29 de julio, estuvimos compartiendo e impulsando los alcances y los compromisos de este ambicioso proyecto, en el que también participan el Banco Interamericano de Desarrollo y las autoridades locales.
Nuestro propósito principal es que Santa Marta sea una ciudad integrada que, por medio de factores como la educación y la cohesión social, pueda responder a las necesidades de la población e impactar directamente en la calidad de vida de sus habitantes.
Para lograr el objetivo, son diversas las acciones que estamos implementando. Una de ellas es el ingreso a la red de Ciudades Sostenibles, un programa liderado por el BID y Findeter que, por medio de un diagnóstico detallado en cuatro di- mensiones de sostenibilidad (Ambiental y cambio climático, Desarrollo urbano, Económico y social y Fiscal y Gobernabilidad) se prioriza e identifica el plan de trabajo para convertir a la ciudad en un territorio sostenible.
También estamos trabajando en el diseño de una solución definitiva para el problema de agua potable y en el desarrollo del sector de Pescaíto, mediante la construcción de escenarios deportivos, educativos y culturales, entre otros.
Más allá de impactar la infraestructura y el equipamiento de la ciudad, este trabajo en equipo contribuirá al desarrollo humano de todos los samarios. Sin duda, ‘Tras la Perla de la América’ es un modelo que, con la motivación de los líderes locales, se puede replicar en otros lugares de Colombia.
Por eso, la invitación es a unir esfuerzos, identificar las fortalezas entre los diferentes actores de la sociedad civil, instituciones gubernamentales y entes territoriales, para transformar nuestras regiones en focos productivos y de desarrollo en el país. Juntos, podemos materializar cualquier sueño.
¡Qué bueno sería que en las diferentes ciudades del país surgieran más Carlos y Claudias! ¡Otra sería nuestra suerte!