Gobierno interviene manejo de recursos de La Guajira
Por irregularidades, la Administración departamental perdió, por un año, el manejo de los dineros para los tres sectores Riohacha, Uribia y Maicao quedaron también sin autonomía para usar dineros de la educación Había despilfarro, afirma minhacienda.
Presidente Santos encabezó ayer Conpes que le quitó al departamento, por un año, prorrogable hasta tres, el gasto de $785.000 millones del SGP para salud, educación y agua. Despilfarro y alto riesgo de que se perdieran, además de deficiencias en los servicios, motivaron la decisión en medio de la crisis humanitaria y los problemas de gobernabilidad.
El despilfarro y los riesgos crecientes en el manejo de dineros públicos, que han conllevado a una “mala calidad” o incluso a que no se presten los servicios de salud, educación y agua potable, además de la irresoluble crisis política, llevaron al Gobierno Nacional a intervenir los recursos que debía girar este año a La Guajira para esos tres sectores.
La decisión, adoptada a primera hora en la mañana –como lo había anticipado EL HERALDO– por el Consejo Nacional de Política Económica y Social, Conpes, en presencia del presidente Juan Manuel Santos y todos sus ministros, significa que este Departamento no manejará en 2016 los cerca de $785.000 millones que debía recibir para educación ($513.000 millones), salud ($216.000 millones) y agua potable ($56.000 millones), recursos provenientes del Sistema General de Participación, SGP.
El Director de Planeación Nacional, Simón Gaviria, dijo que de no resolverse los problemas detectados en cada uno de los tres sectores, la intervención se prolongaría “hasta por tres años”.
FALLAS PROTUBERANTES. “Eso está acá (en La Guajira) muy crispado, muy crispado”, dijo un dirigente que pidió la reserva de su nombre y enfatizó que “los que están pegados en la teta (de los recursos públicos) han sido los primeros en brincar; los están destetando”.
Sobre la intervención fiscal, fue el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, quien afirmó, en rueda de prensa, que en territorio guajiro había “despilfarro de recursos” y sostuvo que “ante circunstancias excepcionales, medidas excepcionales”. Añadió que el Gobierno Nacional “defiende la descentralización”, pero cuando identifica “fallas protuberantes” en la prestación de servicios que son esenciales para los colombianos, “tenemos que aplicar estas medidas extraordinaria”. Calificó la de La Guajira como “una situación insostenible por la mala calidad de los servicios de educación, salud y agua”.
NO PUEDEN GASTAR. Cárdenas lanzó, de inmediato, un mensaje a los secretarios departamentales de Salud (César Ballesteros García) y de Educación (Jorge Céspedes Ospino): les advirtió que ya “no tiene funciones como ordenadores del gasto”.
También le fueron retiradas esas funciones al encargado de el Plan Departamental de Agua (Delay Magdaniel), que se nutre de un préstamo del Banco Mundial. Anunció el minhacienda que expedirá tres resoluciones nombrado a los nuevos responsables de manejar los recursos de la salud, la educación y el agua, lo que la Presidencia de la República calificó como “equipos élite” para hacer frente a esta parte de la crisis guajira.
“Estamos protegiendo los recursos de los colombianos, y particularmente de los habitantes de La Guajira”, subrayó Cárdenas.
LAS ANOMALÍAS. Gaviria dijo que en materia de agua y saneamiento las coberturas de La Guajira están por “debajo del promedio nacional”, al punto de que solo tres municipios de 15 suministran agua apta para consumo humano.
Además, pese a las notables necesidades de contar con el agua, actualmente están suspendidos 17 proyectos porque ni la Gobernación ni las alcaldías han contratado las interventorías. Entre 2010 y 2015 el Departamento no ejecutó transferencias para este servicio por $39.101 millones.
En el sector Educación es el único Departamento del país que no ha empezado la jornada escolar para cerca de 15.000 niños, además de que fueron detectadas contrataciones sin el lleno de los requisitos legales; hay irregularidades en el reconocimiento de horas extras a maestros y se han perdido recursos de la Nación por no reporte de información.
Pero las irregularidades no paran ahí. En el manejo de la salud hallaron que recursos para financiar jornadas de vacunación u otras actividades de prevención, se gastan en sillas y papel para oficinas.
La red pública hospitalaria no está certificada, lo que impide que se hagan inversiones; existen deudas acumuladas por unos $35.000 millones, lo que afecta el acceso y la calidad de este servicio, manifestó Simón Gaviria. El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, dijo que esperan lograr el saneamiento financiero, pagar las deudas y ejecutar oportunamente los recursos del sector.
Paralelo a la decisión del Conpes, el presidente Santos prepara el nombramiento de los encargados en la Gobernación y la alcaldía de Riohacha en reemplazo de Wilmer González y Fabio Velásquez, presos por delitos electorales y peculado, respectivamente.