¿Percepción o realidad?
La aprehensión a veces lleva a equivocaciones con efectos desastrosos. La percepción que se tenga de lo socio-político y la corrupción existente lleva a lo extraño. El caso de las encuestas sobre la favorabilidad del nuevo partido frente al Congreso y la supuesta favorabilidad por parte de algunos encuestados para con el nuevo partido hace pensar que para los encuestados la corrupción y los crímenes son incluyentes, pero la primera tiene un mayor peso específico. Con esto se confirma la polarización política de los colombianos, producto de la desinformación por parte de algunos medios con la malsana intención de personas o grupos a quienes asiste la costumbre de pescar en río revuelto. Ahora se ha de preguntar cuáles fueron los parámetros aplicados por los estadígrafos en la toma de la muestra y si 2.000 encuestados es una muestra homogénea y representativa para un universo como Colombia. Sin embargo, hablando coloquialmente, en cualquier momento o lugar salta la liebre, cuando el historial del nuevo partido contiene ciertas cualidades que todos los colombianos, incluidos ellos, saben que no es verdad. Pero viviendo en democracia, y en eso Colombia es un buen ejemplo ante el mundo, se posee el voto como arma para defender nuestro estado democrático de quienes pretendan apoyarlo. En este estado de cosas y colocando en modo frío la cabeza no queda de otra sino, para las próximas elecciones, depositar el voto por el o los menos corruptos, ya que votar en blanco sería abrir más de lo que está, el portillo de entrada a más corrupción. Ulises R. Rico Olivero uliricol93@hotmail.com