Patrulleros involucrados serán separados del cargo mientras dura la investigación

En un comunicado con siete puntos, la Policía Metropolitana de Santa Marta dio su versión sobre los hechos ocurridos en Palermo e informó que los patrulleros involucrados en la muerte del joven Saúl Fernández Pinzón serán separados de sus cargos mientras se lleva a cabo la investigación.

“La Policía Metropolitana de Santa Marta, en forma inmediata, aperturó una investigación penal y disciplinaria para esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar de este hecho. De manera temporal, y en el marco de la Política Integral de Transparencia Policial, los uniformados serán separados de su cargo mientras se adelantan las investigaciones correspondientes. Igualmente, la Policía Nacional colaborará con toda la información que requiera la Fiscalía General de la Nación para el esclarecimiento de los hechos”, dice el documento emitido por la institución.

Entre tanto, el comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, coronel Gustavo Berdugo, solo opinó que el video del suceso “es la evidencia que tiene la Fiscalía en su investigación”.

“Ya se inició la investigación con justicia penal militar y con control interno de la institución, además, estamos colaborando con la Fiscalía para que se den todas las garantías procesales y se pueda esclarecer el hecho”, precisó el oficial.

Señaló que uno de sus policías fue herido tres veces con un cuchillo en uno de sus brazos por parte del joven de 18 años y que éste no solo portaba un arma blanca sino que “los médicos que lo atendieron en Barranquilla le encontraron en su cintura una pistola hechiza”. Por su parte, la personera municipal de Sitionuevo, Magdalena, Dorey Fontalvo, dijo que “hubo un mal procedimiento policial”. La funcionaria hizo la aseveración después de culminado un consejo de seguridad en la ribereña población, a la que asistieron la Alcaldía, representada por el Secretario del Interior, inspectores de Policía y los comandantes de la estación de Policía de Palermo y Sitionuevo. Manifestó que desde un punto de vista jurídico “procedieron erradamente porque el joven había sido reducido. No había por qué matarlo sino aprehenderlo y llevarlo ante la justicia. Además, hubo flagrancia”.

Indicó que se trataba de una persona que a pesar de estar contraviniendo el Código Penal, tiene plenos derechos como ser humano.