Un Caribe pobre
No es la primera vez que se evidencia que la Región Caribe es la más pobre del país, y esta no será la última vez que se plantea esta dolorosa realidad. Según la encuesta nacional de presupuestos de los hogares que realizó el DANE entre 2016 y 2017, más de un analista se ha sorprendido al ver que en términos de ingresos de la unidad familiar que tiene en promedio dos perceptores de ingreso, la situación de la Región Pacífica es levemente mejor que la de los siete departamentos costeños. Esto para no compararla con Bogotá, la zona donde se concentran las familias con los más altos ingresos del país, y con la Región Centro que cubre la zona cafetera, entre otras.
Quien piensa en las capitales de la Región Caribe, entre las cuales están Barranquilla, Cartagena y Santa Marta, y mira al Pacífico donde, con excepción de Cali, sus otras capitales tienen desarrollos menores a las de la Costa, cuesta entender por qué los departatas mentos del Caribe colombiano son en su conjunto más pobres que los del Pacífico.
Para comprobar la pobreza caribeña, basta con identificar cuántas personas que perciben ingresos por trabajo reciben montos mensuales inferiores al salario mínimo estipulado por la ley colombiana. La diferencia es abismal con Bogotá, es grande con la zona Central y poca con la Pacífica. Al tener el Caribe más del 55% de quienes realizan un trabajo con ingresos inferiores a lo mínimo estipulado por la ley, es una explicación contundente de la pobreza del Caribe colombiano.
Al otro extremo, la proporción de la población que gana más del salario mínimo por ingresos laborales corrobora lo anterior. Los de mayores ingresos laborales del país sin duda se concentran en Bogotá, donde alrededor del 70% de los ocupados ganan más del mínimo; le sigue la región la central con 50% de su población ocupada, superando esa línea de ingresos; y finalmente con un 40% las regiones Oriental, Pacífica y Caribe.
De otra parte, cuando se tienen en cuenta los ingresos monetarios totales que recibe la unidad de gasto, es necesario aclarar que, a diferencia del Caribe, el Pacífico se beneficia de la mayor proporción de subsidios monetarios para los sectores más pobres, y en esto le gana al Caribe.
El otro elemento que debería estudiarse para explicar la diferencia entre las regiones Caribe y Pacífico es el grado de informalidad, porque es allí donde no se cumple para nada la Ley laboral que exige partir del salario mínimo establecido legalmente. El servicio doméstico y su pago inferior al salario mínimo en la Región Caribe es el mejor ejemplo de lo poco que se acata la ley.
Además, debe recordarse la existencia de tierras muy ricas pésimamente explotadas y probablemente lo más grave: ¿no será el feudalismo que todavía impera, especialmente en sus ricas zonas rurales, donde se debe buscar una parte de la explicación? Si esto es lo que sucede, lo que la Región Caribe necesita es moverse al capitalismo y abandonar su manera de manejarse basada en prácticas que no existen.