PARTIDAZO CON VICTORIA DE TITANES.
El equipo de Barranquilla venció 81-76 a los Warriors de San Andrés y comenzó con pie derecho su participación en la Liga de Baloncesto Profesional ➲ Un triple del venezolano Medina resultó crucial.
Clavadas, tapones, triples y vistosas canastas se vivieron en el juego que los Titanes de Barranquilla le ganaron 81-76 a los Warriors de San Andrés, anoche en el coliseo Elías Chegwin en la primera jornada de la Conferencia Oriental de la Liga Profesional de Baloncesto Colombiano.
La agonía del juego estuvo llena de vida. El tablero del coliseo Elías Chegwin mostraba que Titanes de Barranquilla y Warriors de San Andrés igualaban 74-74 cuando solo faltaba un minuto y 34 segundos por jugarse. Lucha ardua, defensas cerradas, todo el mundo atento. Reclamos aquí, protestas allá.
Titanes tomó ventaja de un puntico cuando el cronómetro marcaba que solo restaban 43 segundos. Gritos, nerviosismo, banquete de uñas, expectación. No estaba claro cuál sería el ganador hasta que el venezolano Jesús Francisco Medina amagó con ceder la bola, se detuvo al borde de la raya de tres puntos, puso su mira y se atrevió a lanzar… ¡Canasta! ¡Canastazo! ¡Explosión de júbilo en el escenario de la 72! ¡Triple que vale oro! ¡Triple victorioso!
Medina fue la medicina a tanta paridad y marcó la diferencia en el tramo decisivo del cotejo.
Fue un partidazo de principio a fin. Sin bostezos, sin ceños fruncidos, sin decepción, sin respiro. Titanes y Warriors protagonizaron un emocionante, vibrante y reñido duelo que solo se pudo definir en los últimos segundos a favor del local 81-76, anoche en el Coliseo Elías Chegwin, en la primera jornada de la Conferencia Oriental de la Liga Profesional de Baloncesto Colombiano.
Desde el génesis hasta el colofón del encuentro, los dos equipos brindaron un espectáculo muy competitivo y entretenido en el regreso del baloncesto profesional a la capital del Atlántico después de 18 años.
Clavadas, tapones, triples, vistosas canastas y polémicas se presentaron durante el choque que se desarrolló en medio de una aceptable asistencia de público, la mayoría local y una minoritaria pero bullanguera parte isleña.
El estadounidense Michael Sneed, el que tiene la barba al estilo de su ídolo de los Rockets de Houston, James Harden, fue el máximo anotador de Titanes con 17 puntos. Le siguió su compatriota Xavier Roberson, con 16 (doce de ellos a través de cuatro triples de 10 intentos) y Medina, con otros 16.
“Debemos seguir mejorando, lo hicimos bien. Tenemos que jugar en equipo y apoyarnos mucho, es un buen comienzo”, declaró Sneed.
El jugador con más puntos en todo el juego fue Edward Steele, del quinteto isleño. Conquistó 26 en total. John Hernández, el gigante de María La Baja, Bolívar, que mide 2 metros con 10 centímetros, aportó 11 unidades a los Warriors.
El bolivarense, que festejaba de manera peculiar cada punto, generando rechiflas y gritos de la tribuna, tuvo un conato de bronca con Medina, pero rápidamente fue controlado por los compañeros de ambos. No pasó de los gritos y un cara a cara retador.
“Eso se queda en la cancha, nos tomamos un café y ya, somos amigos, mañana será otro día”, dijo Hernández restándole importancia. Medina, que también consideró que “fue una calentura del partido”, se dedicó a jugar y consiguió el triple vital para asegurar el triunfazo.
SE REPITE EL DUELO. Hoy, a partir de las 8 p.m., se repite el duelo en el coliseo Elías Chegwin.