Bolsonaro invoca a Dios y la Constitución al iniciar la transición en Brasil
El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, invocó ayer a Dios y la Constitución y recibió mensajes sutiles a favor de la tolerancia durante una sesión solemne en el Congreso por el 30 aniversario de la Carta Magna de 1988.
“En democracia, hay un solo norte: el de nuestra Constitución”, declaró el excapitán del Ejército, invitado a tomar la palabra en esa ceremonia en Brasilia, en presencia del presidente saliente, Michel Temer, de los jefes de la Cámara de Diputados y del Senado, del Supremo Tribunal Federal (STF) y de la fiscal general de la República.
Bolsonaro se declaró durante su campaña “esclavo de la Constitución”, tras verse obligado a desautorizar a su compañero de fórmula, el general retirado Hamilton Mourao, quien había adelantado la idea de redactar otra con un consejo de notables, prescindiendo del Congreso y de los electores.
La fiscal general, Raquel Dodge, se congratuló por el hecho de que “el presidente electo saludara la Constitución y sus normas, tal como lo hicieron las autoridades actuales”.
La Constitución de 1988 “dio garantías” para que los fiscales puedan cumplir con su mandato “luchando contra la corrupción, defendiendo el medio ambiente, defendiendo libertades, defendiendo la autonomía universitaria, la igualdad de género y luchando contra la discriminación que aún existe en nuestro país”, declaró Dodge.