Junior, que no es acomodo, que es fútbol…
Nadie le puede negar a nadie que avizore su futuro y se “acomode”. Lo digo porque cada vez, por estas épocas, se habla de la posibilidad que un equipo pierda su último juego para evitar un rival o que un equipo que pelea entrar a la postemporada ofrezca incentivos a otros eliminados que pudieran ayudarlo a clasificar. Antes se hablaba del hombre del maletín, pero eran otros tiempos y otras formas pues se decía que daban incentivos para perder. Lo traigo a colación por las llamadas que he recibido sobre “ah vaina, Julio se acomodó” refiriéndose a Comesaña y al Junior.
Es posible y válido lo del acomodo en todos los certámenes del mundo, en todos los deportes. Lo que no logro entender es cómo un técnico podría pararse en el medio del camerino y decir a sus dirigidos “hoy vamos a perder”. De pronto, diría yo, lo más que podría hacer es hablarle de las posibilidades futuras y dejar esa idea en el ambiente. Pero, decirle a un grupo de frente, antes de un juego, “hoy vamos a perder” no cabe en absoluto.
No sé si seré muy desprevenido o muy candoroso, pero no creo posible que un técnico de cualquier deporte le insinúe o le diga directamente a sus dirigidos “hoy vamos a perder”. Es que no se trata de un partido, ni de una clasificación, se trata de su carrera, de su credibilidad, de su prestigio.
Que Comesaña puso a su segundo equipo para descansar a su primera alineación, que jugará ante Santa Fe en Copa Sudamericana, eso lo sabíamos. Es más, nada de raro tiene pues esa segunda alineación sumó muchos puntos. La presencia de los jugadores jóvenes era inevitable por cuanto estamos a las puertas de jugar una final continental. Sin embargo, no olvidemos que jóvenes sí son, pero con muchas horas de vuelo en la ‘A’ y en la ‘B’.
Creo que hubo juego limpio en esta última fecha. Leones eliminó a Nacional, Rionegro se aferró al octavo lugar ganando a un hueso duro como Bucaramanga, Santa Fe ayudó a eliminar a Nacional y a Cali venciendo por amplio margen a Millonarios. Junior ganaba cómodamente el juego y, después de las sustituciones, perdió el control del partido.
Ahora se vienen los topes. Santa Fe se ganó la rifa del tigre pues le tocó el Tolima a quien todos huían. A Caldas le tocó Rionegro, el 8º clasificado y es favorito. Medellín y Bucaramanga jugarán una serie bastante dura y pareja. Junior y Equidad harán una llave equilibrada pues son equipos bien trabajados y tácticamente muy definidos, aunque es apenas lógico pensar que la nómina del Junior (nombre x nombre) es más que la de Equidad, pero, no olvidemos que el equipo de Suárez fue uno de los tres grandes equipos del torneo junto a Tolima y Once Caldas.
Estamos a menos de un mes de la final de la Liga Águila y de la Copa Suramericana. Gracias al Dios del fútbol, Junior está con reales posibilidades en ambos torneos. No me diga que no va a ir al estadio. No se vale…