¡Vamos por la octava!
Junior igualó 1-1 ante Águilas y avanzó a la final de la Liga, donde se medirá al Dim. El primer duelo será el domingo. El jueves va por la final de la Copa Sudamericana.
Junior solo pudo empatar 1-1 ante Águilas Rionegro, ayer en el estadio Roberto Meléndez, pero le bastó para clasificar a la final de la Liga, donde se medirá al Medellín, que eliminó al Tolima al vencerlo 2-0. Los Tiburones encararán el primer duelo por la octava estrella, el domingo en el ‘Metro’.
Juniorista, festéjalo. No fue tan fácil como muchos creían. Sudando, cruzando dedos, quemando tiempo, protegiendo el balón en zonas lejanas a José Luis Chunga, custodiando con todo su arco y con algo de suspenso, se terminó de conseguir el objetivo. Sí, se sufre, Junior solo le pudo empatar 1-1 a unas combativas Águilas, ayer en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, pero también se goza, la igualdad fue suficiente para clasificar a la final de la Liga por novena vez en la historia de los torneos cortos. ¡Sí, la final! El triunfo en Rionegro, el vilipendiado triunfo 3-2 en la ida, fue el que marcó la diferencia en la serie que le permitirá a los rojiblancos disputar el máximo galardón del balompié nacional ante Medellín, que eliminó anoche al Tolima.
El primer duelo es el domingo 2 de diciembre en el ‘Metro’, el segundo el 9 de diciembre en Medellín.
Los Tiburones, que el jueves batallarán de nuevo en su casa ante Santa Fe por avanzar a la final de la Copa Sudamericana (en lo que sería su primera internacional de la historia), sellaron su tiquete a la última instancia con dificultad. Más por la presión de la estrechez de la ventaja que por grandes méritos ofensivos del adversario.
Un gol de James Sánchez, al minuto 18, parecía descorchar una victoria sin apuros.
Los rojiblancos salieron a imponer las condiciones, como de costumbre, aunque un poco más medidos, sin afanes. La ventaja conseguida en territorio paisa en el partido de ida (3-2) parecía tenerlo más calculador y tratando de aprovechar la necesidad del rival.
Así, dando pasos con cuidado, Junior fue avanzando hacia la portería de Lucero Álvarez y pudo romper el encanto. Corría el minuto 18 cuando James Sánchez remató de primera y de media volea un pase de Jarlan Barrera. El barranquillero venció la resistencia del cancerbero charrúa y puso a festejar a los aficionados que en regular número llegaron a las tribunas del ‘Metro’.
José Luis Chunga permaneció con sus guantes inmaculados. Águilas requería el triunfo, pero no se le notaba. No generó ni una sola opción de gol.
Junior pudo concluir la etapa inicial con el marcador 2-0, pero el asistente 1, Humberto Clavijo, gra- tamente recordado por la hinchada rojiblanca por anular (por offside) la sanción de un penal contra el Tiburón en la final de la Liga 2011 II ante Once Caldas, se equivocó al marcar un fuera de lugar inexistente. A falta de VAR, injusticia.
Luego del descanso, cuando los equipos apenas se acomodaban, Águilas encontró el descuento en un parpadeo de Chunga. Tal vez frío por la escasa acción, se complicó en la ejecución de un lejano y domable tiro libre de Car- los Ramírez. Dio rebote y Daniel Muñoz se avivó.
A partir de ahí, los roji- blancos jugaron con la presión de que un gol del Rionegro igualaba la serie. El cuadro paisa se envalento- nó y dio uno que otro susto. Jarlan también lo dio en la portería de Lucero estrellando en el palo un contragolpe. Hubo algo de drama y banquete de uñas en las tribunas, pero Junior supo meter en el congelador el resultado y es finalista.