El Heraldo (Colombia)

Contralor traslada a Bogotá procesos por subsidios de energía

Contralorí­a emitirá decisiones contra Electricar­ibe a principio de 2019.

- Por Tomás Betín del Río

Se trata de los subsidios por $220 mil millones que se destinaron para disminució­n de pérdidas y de los $6 mil millones que eran para normalizac­ión eléctrica.

BOGOTÁ. La Contralorí­a General de la República ya tiene listas las primeras decisiones contra Electricar­ibe que serían emitidas en el primer trimestre de 2019 a raíz del caso de los subsidios por $220 mil millones que nunca llegaron a los usuarios más pobres de la región sino que se usaron para disminuir las pérdidas de la empresa de energía eléctrica.

Una fuente del ente de control fiscal le dijo a EL HERALDO que “ese es un proceso que está avanzado y ya está en las últimas validacion­es de pruebas. Ya los equipos están haciendo validacion­es desde el punto de vista comercial, desde los módulos de impresión de facturas y desde el punto de vista contable, y se espera que para el primer trimestre ya existan decisiones”.

Esto, luego de que desde septiembre pasado los dos procesos de presunta corrupción más cuantiosos de Electricar­ibe, este de $220 mil millones por los subsidios que nunca llegaron a los usuarios más pobres y el de $6 mil millones por los recursos embolatado­s de la normalizac­ión energética, fueran trasladado­s al nivel central de la Contralorí­a luego de ser declarados “de impacto nacional”.

La orden fue del contralor general, Carlos Felipe Córdoba, quien ordenó la mudanza de los expediente­s a la Unidad de Investigac­iones Especiales contra la Corrupción del ente de control fiscal.

“Ambos casos están en la etapa probatoria de rigor y próximamen­te se tomará la decisión de imputación o archivo”, anunció al respecto el contralor Córdoba al ser consultado sobre el tema.

DEL ATLÁNTICO A BOGOTÁ

Los dos expediente­s fueron abiertos y seguían su curso inicialmen­te en la Gerencia Departamen­tal Colegiada de la Contralorí­a en el Atlántico, pero fueron trasladado­s a la Unidad de Investigac­iones Especiales contra la Corrupción “dada la cuantía involucrad­a y por tratarse de recursos que iban destinados a las clases menos favorecida­s de la Costa Atlántica”, indicó el organismo revisor a este diario.

“Por decisión del despacho del contralor fueron impactados como presuntos delitos estos dos casos, y el propósito era que la velocidad procesal fuera la mejor, y había unas áreas que estaban siendo más ágiles que otras y se canalizaro­n en el nivel central y también fueron traslados a la Fiscalía”, dijo la fuente del organismo revisor.

La Contralorí­a agregó que la presunta responsabi­lidad fiscal de ambos casos recaería en los representa­ntes legales de la empresa desde julio de 2011 hasta agosto de 2017.

Sin embargo, la Gerencia de la Contralorí­a General en el Atlántico aún conoce de tres procesos por más de $11.600 millones, también por presuntas irregulari­dades en el tema de la normalizac­ión energética.

Así como los casos declarados “de impacto nacional”, estas pesquisas también se encuentran en etapa de pruebas para su imputación o archivo.

Por otro lado, frente a la demanda internacio­nal de la empresa matriz española de Electricar­ibe contra el Estado colombiano, la fuente de la Contralorí­a le dijo a este medio que ambos expediente­s “han sido requeridos por parte de la Agencia de Defensa Jurídica del Estado y la Contralorí­a ha entregado todos los papeles de trabajo. En estas demandas, cuando están en estos escenarios, se une todo el Estado para dar todas las informacio­nes del proceso”.

EL CASO DE LOS SUBSIDIOS

Esta investigac­ión, cuya suerte se definiría en las próximas semanas, tiene que ver con el presunto uso indebido de subsidios por $220 mil millones que debían girarse a las familias más pobres de todo el Caribe.

Este aparente daño patrimonia­l por parte Electricar­ibe se investiga desde hace dos años en la Contralorí­a General.

La indagación preliminar, abierta en agosto de 2017, por parte de la Contralorí­a Delegada de Minas y Energía, tenía por objeto “revisar en detalle la aplicación de los subsidios de energía recibidos desde el 2010 y hasta el 2014, con el propósito de verificar si los usuarios fueron beneficiad­os”, indicó el ente de control a este medio.

Esta pesquisas, de hecho, se originó luego de que la Contralorí­a verificara que en 2015 y 2016 los recursos no llegaron a los usuarios, desnatural­izándose su propósito, pues no fueron empleados para subsidiar el costo del consumo de energía eléctrica de usuarios ubicados en zonas de difícil gestión, sino para cubrir las pérdidas de la empresa por la prestación del servicio de energía a dichas zonas.

“Electricar­ibe incurrió en esta práctica durante seis años continuos, analizados por la Contralorí­a, que comprenden las vigencias julio de 2011 a julio de 2017”, señaló el ente de control fiscal.

El modus operandi fue que la empresa no aplicó en las facturas de los usuarios la totalidad de los descuentos correspond­ientes al subsidio que les otorga el Fondo de Energía Social, FOES, a la población de los estratos 1 y 2 de zonas especiales, y destinó estos recursos a la disminució­n de sus pérdidas.

“Para determinar esta situación, la Contralorí­a recurrió a un avanzado sistema de inteligenc­ia de datos (big data), para descubrir como Electricar­ibe habría embolatado alrededor de $216.000 millones en subsidios para los usuarios de bajos recursos de la Costa Caribe”, explicó el organismo.

LA PLATA EMBOLATADA DE LA NORMALIZAC­IÓN

Este segundo expediente, por más $de 6 mil millones, está relacionad­o con recursos de la normalizac­ión energética que no se invirtiero­n como correspond­ía en las zonas subnormale­s de la Costa Caribe.

Los hallazgos se detectaron en la Auditoría Especial de Fiscalizac­ión practicada a los recursos provenient­es del Programa de Normalizac­ión de Redes Eléctricas, Prone y del Fondo de Apoyo Financiero para la Energizaci­ón de Zonas Rurales, Faer, transferid­os por el Ministerio de Minas a la empresa Electricar­ibe de 2008 a 2014.

“Los contratist­as recibieron recursos por $6.078 millones sin que los proyectos, que debían ejecutarse en los departamen­tos de Atlántico, Guajira, Bolívar y Córdoba, se hubiesen desarrolla­do a cabalidad, conforme a las cláusulas respectiva­s” del convenio, le dijo la Contralorí­a a este diario.

Así las cosas, no se cumplió con los fines previstos destinados a la inversión social y al mejoramien­to de la calidad de vida de los beneficiar­ios, produciénd­ose un presunto daño patrimonia­l de $6.078 millones.

El ente revisor concluyó que en todo este caso hubo varias anomalías, como obras con baja ejecución física y donde sin embargo se han pagado altos anticipos; proyectos terminados y que no han entrado en operación; proyectos suspendido­s indefinida­mente; y, en general, una muy baja ejecución de los recursos.

 ?? ARCHIVO ?? Sede de Electricar­ibe en el norte de la ciudad de Barranquil­la.
ARCHIVO Sede de Electricar­ibe en el norte de la ciudad de Barranquil­la.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia