Cumbia y samba en la fiesta de la afición
Los aficionados del Junior cumplieron con la cita en la final de la Copa Sudamericana y alentaron con todo ante Atlético Paranaense.
Los hinchas del Junior y Atlético Paranaense disfrutaron el partido en un ambiente de confraternidad, en distintos puntos de la ciudad.
La efervescencia fue aumentando con el pasar de las horas. El desfile rojiblanco adornó los alrededores del estadio Metropolitano Roberto Meléndez. La afición llegó temprano y con el ánimo por las nubes. No era un miércoles cualquiera. Una final internacional no se juega todos los días por eso la afición se vistió de gala para hacerle fuerza a Junior en el juego de ida de la final de la Copa Sudamericana ante Atlético Paranaense.
“Es una cita con la gloria. Hoy más que nunca tenemos que apoyar a Junior. Es una final internacional y hay que alentar con todas las fuerzas. El equipo nos necesita y aquí estamos diciendo presente”, dijo con emoción Luis Pérez, quien llegó desde Sincelejo para presenciar el encuentro.
Las ventas de camisetas se incrementaron. Todos cantaban los coros del Junior y la ansiedad se apoderaba de la afición cuando se acercaba la hora del partido. Con la llegada del bus del Junior al estadio las emociones incrementaron. Las cornetas sonaron más fuertes y los seguidores tiburones continuaban ingresando en masa al escenario de la Ciudadela 20 de Julio.
Los hinchas del Atlético Paranaense también hicieron su arribo. Fueron llegando de a poco, pero después aparecieron en gran cantidad. Se mostraron contentos y con la ilusión de llevarse un resultado positivo para Brasil.
“Junior es un rival duro, pero tenemos un buen equipo y confiamos en conseguir un empate o una victoria para rematar en Curitiba”, dijo Marcio.
En el estadio la fiesta aumentó. El ‘Metro’ fue una verdadera caldera. Los 38.094 aficionados que asistieron al compromiso alentaron con todas sus fuerzas. Cuando Junior saltó al terreno de juego, la tribuna de norte se iluminó de rojo. Bengalas y globos se pasearon con los colores del equipo Tiburón y la gente gritó a todo pulmón: “¡Junior! ¡Junior! ¡Junior!”.
El equipo contó con el apoyo de su afición que le cumplió la cita en busca de ‘la otra mitad de la gloria’.