POLÍTICA DE EDUCACIÓN
“El reto del Gobierno Nacional es volcar la mirada hacia la periferia, e invertir en el mejoramiento de la calidad educativa en estas regiones. En lo que respecta a las instituciones académicas, la clave está en tener buenos docentes y buenos estudiantes, por lo que deben capacitar a sus profesores y exigir mejores resultados a los alumnos”, dicen Meisel y Granger. Por su parte el profesor Villarraga señala que a partir del reconocimiento de características y necesidades diferenciadas que presentan los estudiantes y las instituciones de acuerdo a los contextos regionales, es posible orientar la política educativa y los programas de intervención. “No hay soluciones únicas que sirvan a todos los contextos por igual”, agrega. En muchos artículos y documentos del Banco de la República se hace hincapié en la necesidad de la descentralización como un mecanismo para el cierre de brechas regionales. De acuerdo con Meisel y Granger, cuando se toman decisiones muy centralizadas, en muchas ocasiones se hacen en medio del desconocimiento de la realidad que afrontan las regiones, por lo que no responden a las necesidades de la gente. “La descentralización de la política educativa a las entidades territoriales tiene un potencial grande para disminuir las deficiencias en calidad que afectan a regiones periféricas como el Caribe colombiano”.