Un gran invento
Me refiero en este momento a algo que, para mí, constituye un gran invento, muy útil para ocupar largas horas de espera, a las cuales están expuestas las personas de edad avanzada, como es mi caso. Pero en particular lo encuentro más útil, para los maestros que en el aula lo proponen a sus estudiantes como forma de desarrollar su habilidad mental. En esta forma, se vuelve imposible la copia.
Al mismo tiempo, quiero agradecer a Dios que en algún momento se lo haya sugerido a su inventor, el japonés Maki Kaji y manifestar mi admiración por quienes siguen proponiéndolos en muchos periódicos; ¡no es fácil fabricarlos! Me refiero al Sudoku, que he llegado a resolver empleando el método que sugiero a continuacion.
Comienzo por numerar las columnas del 1 al 9 colocando esta serie de números, en la base del sudoku y luego nombrando las filas con las letras del abecedario desde la A hasta la I, que coloco al lado derecho del sudoku, comenzando por la parte inferior del mismo. Esto me sirve para ir anotado todas las jugadas, al mismo tiempo que las hago; por ejemplo, la notación 62C significa colocar el 6 de la columna 2 y en la fila C….
Trabajo con tinta mientras encuentro un motivo lógico para colocar un numero; en caso de que tenga que hacer un ensayo, lo hago escogiendo entre dos posibilidades y sigo anotando con lápiz para poder borrar las jugadas a partir de ésta y optar por la otra posibilidad, en caso de detectar error.
Carlos A. Hernández García