Invías prevé “la gran inundación” si no se actúa ya en Salamina
El director de la entidad asegura que de no atender la emergencia se produciría “la gran inundación” en el norte del Magdalena Caicedo pide actuar con “prontitud”.
El director de Invias, Juan Esteban Gil, consideró que si no se atiende ya la erosión en el kilómetro 2.4 de la vía Salamina - El Piñón se produciría “la gran inundación del norte del Magdalena”.
El funcionario precisó que el “río Magdalena está bajando muy crecido y en las zonas de curvas genera una erosión en las orillas”.
“Estamos en una posibilidad de pérdida de vida”, dijo mostrando una gran preocupación.
Agregó que la entidad a su cargo no se ha cruzado de brazos, sino que está trabajando articuladamente con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Ungrd.
“Hay una propuesta de generar un desvío en la carretera, pero el problema es la posibilidad de inundación”, anotó.
Gil señaló que ya se hicieron visitas técnicas al sitio para definir la clase de obra a realizar.
Insistió en que la construcción de una variante no soluciona el problema.
CAICEDO PREOCUPADO. El gobernador electo del Magdalena, Carlos Caicedo Omar, expresó su preocupación y dijo que “las autoridades que tienen la responsabilidad de atender esta situación deben hacerlo con prontitud para evitar daños irreparables”.
“Les pido a las comunidades que nos mantengan informados y trasladaremos de manera inmediata la información a las instituciones que deben intervenir”, dijo el mandatario elegido recientemente por el voto popular.
Caicedo anotó: “Espero que el departamento, quien no se pronuncia sobre el tema, cuente con los estudios y planes que permitan prevenir y no lamentar”.
ALERTA TEMPRANA. El director de Asoganorte, Julián Saade, dijo que los gremios de la producción han lanzado la alerta temprana y advertido a las autoridades competentes sobre la tragedia que se puede presentar.
“Confiamos en la buena diligencia y actitud de los entes involucrados en la solución del problema”, dijo.
Anotó que de meterse el río Magdalena “habría un desastre de incalculables dimensiones” por cuanto se perderían más de 100 mil hectáreas de tierras inundadas y 10 mil hectáreas de ganaderí, otro tanto de pan coger, pero se pondrían en peligro las cabeceras municipales de Salamina, El Piñón, Pivijay y Cerro de San Antonio.
“Estamos al borde de un desastre incalculable”. CARLOS CAICEDO Gobernador electo del Magdalena