El fútbol de Bielorrusia se hace fuerte pese a Covid-19
Los millones de aficionados, que están cansados de repasar las mejores jugadas de Messi y Cristiano, pueden seguir a la única liga que resiste.
MOSCÚ. Los millones de aficionados al fútbol que están cansados de visionar los partidos históricos del Mundial o de la ‘Champions’ y de repasar las mejores jugadas de Messi y Cristiano en Youtube, tienen una opción mejor, la liga bielorrusa, la única que resiste el embate del coronavirus en el continente.
“Esperemos que Inglaterra, Italia o España también compren los derechos de la liga bielorrusa y que todo el mundo mire nuestra liga”, comentó ayer a Efe el bielorruso Alexandr Hleb, antiguo futbolista de Arsenal y Barcelona.
No es broma. Él mismo explicó que Rusia y Ucrania ya han comprado los derechos para retransmitir en directo por la televisión los partidos del campeonato del país vecino.
El canal de deportes ruso MatchTV mostró el viernes el duelo que enfrentó al actual campeón de liga, el Dinamo Brest, y al Smolevichi, que terminó con empate a un gol, retransmisiones que continuaron el fin de semana.
Fue la primera jornada de la liga bielorrusa, uno de los campeonatos menos conocidos del fútbol europeo. El estadio con más aforo tiene capacidad para solo 22.000 espectadores.
Lo mejor que se puede ver en la liga bielorrusa es un Baté Borísov-Dinamo Brest. No es lo mismo que un Real Madrid-Barcelona o un Liverpool-Manchester City. Fútbol modesto en campos de regional, pero fútbol al fin y al cabo.
Son dieciséis equipos que disputan la liga de primavera a otoño con un largo paréntesis invernal y entre los que uno de los líderes provisionales es el Energetik, que representa a la Universidad Estatal de Minsk.
El histórico Dinamo Minsk, campeón soviético en 1982, y el Baté Borísov, que ganó trece ligas seguidas y ha disputado varias veces la fase de grupos de la Liga de Campeones, son los únicos clubes relativamente conocidos.
Y entre los futbolistas, únicamente Hleb -que tuvo una exitosa carrera en el Arsenal y el Stuttgart, pero no pudo triunfar en el Barcelona, le suena a los aficionados.
Aunque nadie descarta que el campeonato se suspenda en cualquier momento -las autoridades confirmaron este lunes 81 casos de COVID-19-, el portavoz de la federación bielorrusa informó ayer a Efe que la segunda jornada arrancará el 27 de marzo.