“Delenda est coronavirus”
Hace cientos de años, entre Roma y Cartago hubo una rivalidad bélica; Aníbal Jefe Militar cartaginense remontó los Alpes para invadir Roma, no pudo, fue derrotado militarmente. Ante el peligro de actitudes de Cartago, como las de Aníbal, un General romano Escipión ‘’El Africano’’ expresó públicamente con mucha indignación: ‘’Delenda est Cartago’’, lo que ocurrió efectivamente en la Tercera Guerra Púnica por el General Escipión Emiliano, quien derrotó y arrasó a Cartago, cuya ubicación en el norte de Africa es en donde hoy existe Tunez.
El Gobierno de Colombia debe expresar una frase similar: ‘’Delenda es Coronavirus’’.
Muchos científicos y políticos nos hablan cada día del coronavirus y la enfermedad de provoca: COVID-19. Nadie nos dice de dónde viene ni en qué consiste, funcionarios de la CIA conjeturan que surgió de un laboratorio en la ciudad china de Wuhan en donde los estudiaban o crearon y de allí emigró en muchos portadores hacia Europa y América. No existe vacuna ni terapia útil para tratar esta enfermedad, la prueba es los mas de 320.000 fallecidos; de éstos mas de 100.000 en América.
La medicina preventiva ha mostrado éxitos en varias clases de cáncer, en diferentes partes del cuerpo humano, en esta crisis se ha perdido la confianza en científicos como infectólogos y epidemiólogos norteamericanos, europeos, asiáticos y de la OMS. Existe una versión que hace 7 años, un fraile en la Plaza Mayor del Vaticano, predijo esta pandemia; específicamente la historia no registra una profecía del médico francés, Nostradamus en el siglo XVI, lo que si dijo este enigmático personaje es que ‘’habría una tercera guerra mundial,’’ no aclaró si sería con armas o con bacterias.
De las autoridades sanitarias no conocemos vacunas ni terapias. De los gobernantes vemos reencarnaciones de Hitler en el trato a los mayores de 70 años, la reclusión como la que este dictador hizo con los judíos en Varsovia, Polonia en la década del 40. No hay una oferta médica a domicilio para esta franja de colombianos constructores de la nación. Es público el descaro en sobrecostos de contratos para comprar elementos de sanidad y alimentos, rogamos para que los pueblos reaccionen y haya revocatorias de mandatos y pago de penas en una colonia penal nueva, en Puerto Nariño Amazonas, para los responsables de delitos contra el tesoro público. Osvaldo Caraballo Díaz