“Hasta el sufrimiento lo disfruto con Junior”: Patiño
El pitcher de Padres de San Diego estuvo de visita en el club.
Es de los Padres y de ‘Tu Papá’. Luis Patiño, pitcher de la novena de San Diego que este año se convirtió en el primer barranquillero en subir a un montículo de Grandes Ligas, no titubea, no entra en rodeos y lo dice duro y directo, como uno de sus lanzamientos de 100 millas por hora: “Soy de Junior desde que tengo memoria”.
Lo expresa a boca llena, orgulloso, no importa el mal momento por el que atraviesa el equipo rojiblanco, que se encuentra por fuera de los ocho mejores de la Liga. “Hasta el sufrimiento lo disfruto, Junior siempre ha sido un equipo que nos ha dado muchas alegrías y nos ha hecho sufrir, pero ese sufrimiento es algo que siempre no los renueva con títulos. Nos hemos dado cuenta que en los últimos años nos ha regalado muchos títulos seguidos que hace tiempo no se veían. Ahora se viene la Sudamericana y vamos a pelear por eso”, comentó Patiño a través de un video publicado en las redes sociales de Junior.
Con su fe intacta en el cuadro tiburón, ‘El Eléctrico’, como lo apodan, visitó ayer las oficinas administrativas del club y recibió la camiseta que le había solicitado a Miguel Ángel Borja, a través de un comentario que hizo en un ‘live’ del Instagram del delantero cordobés durante la celebración de la conquista de la Superliga, el pasado 11 de septiembre.
Borja le prometió la casaca rojiblanca y el beisbolista la fue a buscar ayer repleto de emoción.
“Uno de los regalos que más me ha gustado. Esta camiseta firmada por Miguel es muy gratificante para mí. Me cae como anillo al dedo”, apuntó Patiño. “Soy
Juniorista desde que nací. Siempre llevo los colores en mi corazón. En Estados Unidos no puedo ver los juegos, pero siempre estoy pendiente del minuto a minuto”, agregó.
El serpentinero agradeció la amabilidad y detalle de Borja. “Es un gran goleador y jugador, yo sé que nos va a dar muchos títulos. Espero que esté en la institución por muchos años más. Gracias, hermanito, un abrazo”, concluyó. RCV