La joya arquitectónica que cerró sus puertas en Barranquilla
Después de 59 años de estar funcionando, la crisis económica llevó a la gerencia a tomar la decisión de cerrar las puertas de esta joya arquitectónica.
El Hotel Majestic, reconocido por su infraestructura neoclásica y ser epicentro de grandes eventos en la ciudad, dejó de operar debido a la crisis del sector hotelero por la pandemia y el embargo de sus cuentas por las deudas con la Dian ➲ Sus fieles empleados evocan su historia.
Es un puñal que me clava en el corazón”. Con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada, Lucy Abuchaibe pronuncia la frase que describe el sentimiento que le invade al tener que tomar la decisión de cerrar las puertas del Hotel Majestic, una de las joyas arquitectónicas del sector Viejo Prado.
Con su particular infraestructura de inspiración neoclásica con toques versallescos y arabescos en el interior del lugar, el Majestic es uno de los icónicos hoteles que durante 59 años recibió la visita de miles de personas, entre las que se encuentran personajes reconocidos y famosos del país y el mundo.
Este bien, ubicado en la carrera 54 con calle 54 de Barranquilla, fue mandado a construir como una vivienda en los años 1924 y 1925 por el ganadero soledeño Alberto Osorio, quien años después la vendió a la familia Abuchaibe, que se encargó de convertir aquella casa gigante en un hotel.
Lucy Abuchaibe, gerente y copropietaria del Majestic, cuenta que el hotel nació como idea de su padre José Abuchaibe, quien al enterarse en el año 1858 que la casa de los Osorio estaba en venta, decide comprarla para evitar que el bien corriera con la misma suerte de la mayoría de las hermosas casas grandes que estaban siendo demolidas para convertirse en edificios en aquella época.
“Mi padre que conocía la casa, le pareció que era algo muy horrible que la ciudad perdiera esta joya arquitectónica y que se destruyera un bien tan hermoso. Entonces lo compró y en los jardines construyó las habitaciones para un hotel, que en ese entonces el único que quedaba en el norte era el Hotel del Prado”, contó.
El nombre ‘Majestic’ fue idea de José Abuchaibe, ya que según su hija, en el mundo varias ciudades tienen un hotel con ese nombre y Barranquilla no podría ser la excepción. Es así como a partir de 1961 abrió sus puertas para convertirse en uno de los hoteles más importantes y tradicionales de la ciudad.
Personajes como el pintor colombiano Alejandro Obregón y el exfutbolista brasileño Pelé hacen parte de la larga lista de reconocidos y famosos que visitaron este lugar. Su particular arquitectura, que cuenta con una sala de estilo francés, un comedor principal de estilo inglés, salones con techos que tienen oro de 24 quilates, hacen parte de lo llamativo y atractivo para la realización de grandes eventos y la visita de propios y extranjeros. Fueron esas características las se tuvieron en cuenta para declararlo Patrimonio Arquitectónico de Barranquilla.
Abuchaibe agregó que durante todo el tiempo ha tratado de conservarlo, de no tocar la parte con una arquitectura especial, como el Salón Granada y el Salón Imperial. “En ese momento, incluso antes de morir, mi padre nos pide que cuidemos el bien, me dijo a mí en particular que lo manejara y lo cuidara y hemos tratado de hacerlo, de tener un negocio que dé tranquilidad, una atención esmerada y personalizada, por eso el hotel gusta tanto al extranjero”.
CRISIS ECONÓMICA
Desafortunadamente la pandemia de la covid-19 ha golpeado fuertemente al sector hotelero y el Hotel Majestic es uno de los que se ha visto más afectado, hasta el punto de cerrar sus puertas a causa de las deudas que no pueden ser canceladas en estos momentos por la baja ocupación del mismo, que no supera el 20%.
La gerente y copropietaria del hotel aseguró que durante todo el tiempo que este funcionó nunca dejó de cumplir con sus obligaciones tributarias, pero debido a las cuarentenas y medidas restrictivas, el dinero no ha sido suficiente para mantener a los trabajadores y al mismo tiempo pagar dichas obligaciones.
El hotel Majestic debe aproximadamente $24 millones a la Dian, cifra por la cual le fueron embargadas las cuentas. Además, dos años de impuesto predial (2020 y 2021) que suman unos $120 millones, según Lucy Abuchaibe.
“La Dian nos exige hipoteca sobre los predios para unos plazos para pagar, lo cual es absurdo cuando se debe una suma irrisoria en comparación con el valor de los predios. El hotel vale más de 6 mil millones y exigen una hipoteca sobre el bien, esto no es tener ningún tipo de consideración”.
Añadió que las ventas han caído en casi un 80 %; entonces, “si bien hemos recibido un alivio del Gobierno nacional, no hemos visto lo mismo en el gobierno local, en la Dian y en el Sena, que nos multa por demoras en cambios de estudiantes. Nos embargaron las cuentas y nos ataron de manos y pies”.
Ante estas circunstancias el Hotel Majestic hace un alto en el camino al no poder cumplir con estas obligaciones.
EL DESEMPLEO
Para Abuchaibe, lo más difícil, además de no poder seguir cumpliendo la promesa que le hizo a su padre de mantener el hotel, es el dejar sin empleo a las 14 personas que hacen parte del equipo de trabajo y que llevan muchos años prestando sus servicios al Majestic.
Son 14 familias las que se ven afectadas con esta decisión, pues quedan desempleados. A esto se suma que con la situación actual que vive el país, no ven tan fácil conseguir un nuevo trabajo en este sector de la economía.
Luis Marques, recepcionista auditor del Majestic, lleva aproximadamente 30 años trabajando en el hotel, con el que esperaba pensionarse para luego dedicarse a disfrutar de la vida con su esposa. El hombre lamentó mucho la decisión.
“Estoy bastante triste, toda una vida trabajando acá. Es muy desagradable esta determinación, pero no por parte de la gerencia, sino que se ha visto obligada a tomarla porque no les han brindado ayuda. Nos perjudica porque es nuestro sustento diario. Yo estoy próximo a adquirir una pensión y ahora por la edad no me reciben en cualquier lado”, aseguró.
Otra de las trabajadoras afectadas con la medida es Natalia Peralta, promotora comercial del hotel y ejecutiva de cuentas, quien manifestó sentirse dolida con la decisión y preocupada por la situación actual que está viviendo el sector hotelero en general.
“Nos duele porque fue epicentro de buenos eventos. Es realmente duro, afecta a las familias que vivimos de esto, y la hotelería y el turismo está bastante golpeado. El hotel había tratado de subsistir, pero no se pudo. Quedamos sin trabajo y ahí es cuando uno mira y se da cuenta de la situación laboral que está enfrentando el país”, dijo Peralta.
Abuchaibe espera que la
LUIS MARQUES Recepcionista
“Estamos muy tristes. Toda una vida trabajando acá”.
NATALIA PERALTA
Promotora comercial “El cierre afecta a las familias que vivimos de esto”.
decisión sea temporal y que puedan contar con la ayuda que necesitan para volver a reabrir sus puertas y no acabar con este hotel. “Hoy, con lágrimas en los ojos, no puedo seguir cumpliendo. Esperamos que esto se recupere, que el turismo vuelva y entonces ver cómo llegamos a un acuerdo con la Alcaldía, con la Dian y con las demás oficinas del Gobierno”.
Según Abuchaibe, el hotel no puede asumir más compromisos, porque no los podrán cumplir.