Investigan a 4...
El directivo de la asociación de militares retirados del país rechazó a nombre de la organización la participación de exmilitares en los hechos.
En sus declaraciones manifestó que “esta sería la primera vez en la historia reciente que mercenarios colombianos delincan en el exterior”.
Y agregó que “los militares retirados que trabajan en otro país, contratados por su capacitación y experiencia en asuntos de seguridad, son empleados legales que en ningún caso están violando ninguna ley y son reconocidos por la ONU”.
El internacionalista Mauricio Jaramillo explicó por su parte a EL HERALDO que con lo sucedido “Colombia queda mal parada porque se deshace la retórica de la seguridad democrática, en la que se cometieron graves violaciones a los DD. HH., y la deja mal regionalmente porque Colombia había querido liderar el discurso de los DD. HH. en Venezuela y llega en mal momento porque este Gobierno nacional ha entrado en demasiadas controversias con organismos de DD. HH.”.
El hecho desató, como era de esperarse, una tormenta política en el país y reacciones desde diferentes sectores.
El ex presidente del Senado, Ernesto Macías, del CD, escribió: “Deben ser pedidos en extradición para aplicarles las máximas condenas. Y la justicia debe investigar quién los financió. Son una vergüenza para Colombia”.
Y el senador Antonio Sanguino, de los verdes, cuestionó: “¿No merece esto un debate sobre formación y doctrina de nuestras Fuerzas Militares?”.