‘Our time on earth’, exposición hecha para pensar en el planeta
Las obras incentivan el pensamiento ambiental. La exposición reúne comunidades indígenas brasileñas.
Con la emergencia climática como punto de convergencia de las diferentes propuestas, “Our time on Earth” trata de agitar la mirada del público para imaginar una existencia más armónica y respetuosa con la naturaleza.
De ahí que la macrourbe que propone el artista australiano Liam Young en ‘Planet City’ se mezcle con las soluciones adoptadas de las comunidades indígenas que traen las brasileñas Sonia Guajajara y Célia Xakriabá o con la gran mesa de comedor para todas las especies que sugiere el colectivo Superflux. Young muestra una película y una selección de ropa vanguardista diseñada a partir de materiales orgánicos, acompañadas por las cifras de la superciudad que congregaría a toda la humanidad y permitiría a la Tierra regenerarse en paz.
“En ‘Planet City’ vemos que el cambio climático ya no es un problema tecnológico, sino ideológico, anclado en la cultura y la política. Esto es una ficción con forma de ciudad”, explica Young en una declaración sobre su obra.
Su propuesta es solo una fantasía arquitectónica contraintuitiva que desafía la opinión generalizada de que las grandes ciudades atentan contra el medioambiente, cuando en realidad pueden convertirse en la forma más sostenible que tiene la humanidad de perdurar en el planeta. El centro Barbican, hogar de algunas de las propuestas más innovadoras y alternativas que se presentan en Londres, exhibe un total de dieciocho proyectos, doce de los cuales comisionados expresamente para esta exposición.
Su propuesta es solo una fantasía arquitectónica contraintuitiva que desafía la opinión generalizada de que las grandes ciudades atentan contra el medioambiente, cuando en realidad pueden convertirse en la forma más sostenible que tiene la humanidad de perdurar en el planeta.
Sus creadores pretenden promover un “cambio en la forma de pensar” que permita al mundo pasar de la “supremacía antropocéntrica al respeto mutuo ecológico”.