Terremoto arrasa el este de Afganistán
El sismo de magnitud 6,1 deja, al menos, 1.500 personas heridas Las autoridades advierten que las cifras podrían aumentar.
Más de 1.500 personas murieron y otras 1.500 resultaron heridas en el movimiento telúrico de 6,1 grados que sacudió el este del país ayer miércoles. En el distrito más afectado, el 70 % de las viviendas quedaron destruidas o dañadas, mientras los equipos de rescate trabajan para localizar supervivientes bajo los escombros. Autoridades advierten que el balance de la tragedia puede aumentar con el paso de las horas.
KABUL. Más de mil personas murieron y otras 1.500 resultaron heridas en el terremoto que sacudió la noche del miércoles el este de Afganistán, donde en el distrito más afectado el 70 % de las viviendas quedaron destruidas o dañadas, mientras los equipos de rescate tratan de localizar a supervivientes.
El sismo de magnitud 6,1, sorprendió a la gente mientras dormía, con escaso tiempo para huir al exterior de sus endebles viviendas de adobe en las remotas provincias orientales de Khost, donde se registró el epicentro, o Paktika, la más afectada por la tragedia.
El número de fallecidos asciende a 1.030, pero las autoridades advierten que las cifras podrían aumentar a medida que avanzan las labores de rescate, mientras como manda la tradición islámica los entierros masivos comenzaron, sin tiempo a velar al cadáver.
El Departamento de Información y Cultura aseguró que solo en los distritos de Gayan y barmal de esa provincia más de 1.000 personas murieron y más de 1.500 resultaron heridas, sin aportar más detalles.
Además, previamente un portavoz del Ministerio de Gestión y Respuesta de Desastres afgano dijo que en Khost habían muerto 25 personas, mientras que en la provincia oriental de Nangarhar fallecieron otras cinco.
El terremoto sucedió cerca de la frontera con Pakistán, donde al menos una persona murió “al derrumbarse el techo de su casa”, dijo el portavoz de la Autoridad de Gestión de Desastres de la provincia paquistaní de Khyber Pakhtunkhwa, donde se produjo el suceso.
TALIBANES movilizan LOS Recursos DISPONIBLES. El Gobierno de los talibanes ordenó poner todos sus recursos a disposición para atender a los afectados en la peor catástrofe regisen el país asiático en décadas.
El máximo líder de los talibanes, el mulá Hibatullah Akhundzada, dio instrucciones “al Ministerio de Gestión de Desastres, los funcionarios pertinentes, gobernadores provinciales y al pueblo afgano a utilizar todos sus recursos para llegar a las familias de las víctimas, sacar a los muertos, y llevar heridos al hospital”, indicó el Gobierno.
El Emirato Islámico hizo además un llamamiento a la comunidad internacional y a las organizaciones humanitarias “para que ayuden a las familias de las víctimas en este gran desastre y brinden la mayor asistencia posible”, añadió el comunicado.
Varias organizaciones humanitarias ya trabajan sobre el terreno en coortrada dinación con las autoridades locales para tratar de rescatar a posibles supervivientes de la catástrofe y atender a los afectados, según informó en un comunicado la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
La tragedia castigó sobre todo a Gayan, en Paktika, donde según la OCHA “hasta 1.800 viviendas resultaron destruidas o dañadas (...) lo que representa el 70 %”de las edificaciones de ese distrito”.
Para acelerar las labores de rescate y el traslado de heridos a los hospitales más cercanos, cinco helicópteros del Ministerio de Defensa afgano, más de 50 ambulancias y múltiples equipos de trabajadores sanitarios han sido desplegados en Paktika y Khost.
Algunas de las mayores catástrofes en Afganistán provocadas por terremotos ocurrieron en 1998 en el norte del país, cuando en febrero dos terremotos de 5,9 y 6 grados causaron la muerte de unas 4.000 personas. Pocos meses después, a finales de mayo, un seísmo de 7 grados volvió a sacudir la zona y causó unos 5.000 muertos.