SABES QUIÉN ERES TÚ?
En un mundo obsesionado con hacer más, la búsqueda de placer, nuevas experiencias y millones de estímulos sensoriales, hemos perdido rastro de nuestra verdadera esencia. Nuestra identidad va ligada a nuestra profesión, hobbies o posesiones y creemos que nuestro valor va determinado por nuestro estatus social o bienes materiales. Vivimos tan enfocados en lo material, en lo externo que muy pocos tienen la oportunidad de descubrir que hay en el interior y responderse: ¿quién realmente soy?
¿Qué es lo primero que se nos viene a la cabeza al preguntarnos que tipo de vida quisiéramos? Lo primero que seguro se viene a la cabeza es: la vida de un cantante o artista famoso, la vida de un millonario reconocido o la de algún deportista exitoso. La búsqueda de lo material, de sentirnos validados e importantes por lo que hacemos nos hace alejarnos de la verdadera riqueza: la plenitud del alma.
La experimentación del vacío se volvió una constante en mi vida, la felicidad que el mundo prometía a través del placer, el poder y el dinero resultó ser e ímera. Entonces decidí embarcar el viaje más prometedor de mi vida, el viaje hacía mi interior.
En este viaje aprendí a ver la vida de una manera distinta, entendiendo que la felicidad es una decisión y va de adentro hacía afuera, no al revés. La plenitud del alma es la verdadera riqueza, es llegar a ese encuentro con quien somos llamados a ser y con todas esas virtudes, dones y talentos que poseemos. Es ese encuentro con un sentido a tu vida, un fuego interior que te llena por dentro y te permite escribir tu de nición de felicidad.
Los jóvenes de hoy en día viven en una presión por encajar en un molde, por parecerse a los demás y por vivir una vida que no es la de ellos. Es más fácil encajar, sentirse aceptado en la sociedad, seguir a las masas y tratar de compensar con lo externo, lo ísico y lo material aquello que carecemos en nuestro interior. La grandeza esta en el autodescubrimiento, en entender que no hay nadie como tú y que en tu interior yace un regalo que nadie más posee.
Llegamos a este mundo sin nada y así mismo nos vamos de él, lo único que queda es el amor que damos, las vidas que impactamos y el bienestar que generamos en el mundo. Cierra tus ojos, respira profundo y escucha lo que hay interior, recuerda que estás aquí por algo y que todo lo que necesitas para ser feliz no se encuentra allá afuera, se encuentra en tu interior.
Transformational Coach