Fuentes y Díaz, como en los viejos tiempos
El samario y el guajiro compartieron en el Barranquilla FC, en la selección Colombia sub-20 que dirigió ‘Piscis’ Restrepo, en Junior y ahora en el combinado de mayores.
En diciembre de 2016, cuando Gabriel Fuentes y Luis Díaz era unos delgados, longilíneos y desconocidos jugadores del Barranquilla FC que soñaban con llegar a Junior, jugar en el exterior y ponerse la camiseta de la selección Colombia, a los dos se les presentó la oportunidad de asistir a un torneo internacional con un combinado patrio.
Fuentes, Díaz y otro de los prospectos del ‘Quilla’ en ese entonces, el delantero Cristian Pérez, fueron convocados por el técnico Carlos ‘el Piscis’ Restrepo al último microciclo de trabajo del seleccionado juvenil que en enero de 2017 debía encarar el Torneo Sudamericano Sub-20 en Ecuador.
El atacante barranquillero no pasó el último filtro y quedó por fuera del campeonato. El samario y el guajiro sí recibieron el aval del ‘Piscis’, aunque a ‘Luchito’ casi lo bajan del avión por el aspecto endeble que proyectaba su figura en esa época.
No se veía fuerte físicamente y se puso en duda su presencia en la Selección juvenil. “Nosotros tuvimos un encuentro antes de irnos para el Sudamericano con el cuerpo técnico y el cuerpo médico, donde se revisó el caso de Luis y prácticamente había una decisión sobre él: si de pronto se tenía a alguien más fuerte, pensar en que podía estar ese otro jugador. Pero la conducta nuestra internamente, a nivel de cuerpo técnico, fue decidir llevar a Luis por esa capacidad que le veíamos. Yo creo que no podíamos traicionar el fútbol dejando un muchacho con tanta capacidad”, recordó ‘Piscis’ Restrepo en diálogo con EL HERALDO.
“La referencia era que si no nos podía rendir físicamente en todos los juegos del Sudamericano, por lo menos que fuera una alternativa para algún juego, para algún rato. Gracias a Dios lo convocamos porque hoy es una figura rutilante y ese paso por la selección de menores es un paso importante”, agregó Restrepo, quien actualmente es el director de selecciones Colombia juveniles.
Fuentes se veía más formado desde el punto de vista atlético, pero futbolísticamente no estaba claro si era defensa central o lateral izquierdo. En el Barranquilla FC jugaba en las dos posiciones, pero en la sub-20 inicialmente lo evaluaron como un zaguero.
“En el caso de Gabriel, fue un muchacho que en primera instancia se observó como central. Luego determinamos y consideramos que podría tener esa posibilidad de manejar la lateral y bueno, hoy vemos que, afortunadamente, en el tiempo él fue consolidando esa posición. Me parece que ha tenido un crecimiento muy positivo, un crecimiento muy bueno, ya con una salida internacional (Real Zaragoza). Siempre mostró mucha condición y disposición para el trabajo. La verdad, un chico sencillo, educado, que al final siempre recibió los consejos en todos los órdenes”, comentó ‘el Piscis’ Restrepo, campeón de Liga como DT de Junior en 1993.
Fuentes y Díaz son amigos del alma desde aquellos tiempos en los que clasificaron al hexagonal final del Torneo Sudamericano, pero se quedaron sin cupo al Mundial de Corea del Sur-2017. Luego compartieron camerino en una gloriosa era de Junior y ahora se reencuentran en la selección absoluta en la que comparten con otro compañero de aquel representativo sub-20, Carlos Cuesta.
“Varios de esos jugadores se han consolidado en el fútbol profesional y algunos salieron al fútbol del exterior. Luis tomó un ritmo de élite, un ritmo top. Hoy lo vemos en el Liverpool aportando toda esa velocidad, esa picardía, esa gambeta. Tuvo un progreso porque le sumó gol a todo eso. Hoy tenemos un jugador muy completo”, resaltó Restrepo.
“Veo con mucho agrado que jugadores de esas tres generaciones que yo dirigí hoy estén en la selección de mayores. Me complace mucho. Nosotros teníamos dos obligaciones con la Federación, una era clasificar a los mundiales y la otra encarrilar jugadores hacia la selección absoluta. Hay convocatorias en las que se han llegado a tener 15 jugadores que pasaron por las menores”, añadió con orgullo.