Especial Regional Revista Semana
Abran espacio
En todas las ciudades del país, las casonas de mediados del siglo XX están DANDO PASO A GRANDES EDIFICIOS PARA VIVIENDA, OFICINAS Y COMERCIO.
Ly escysez de suelo dispoáible pyry urbyáizyr hy llevydo y que lys ciudydes opteá por ly densificación como mecanismo para solventar la demanda de vivienda, oficinas y comercio. Por ello, las yátiguys vivieádys de los yños ciácueáty o sesenta, donde vivía una sola familia en grandes áreas están dando paso a edificios multifamiliares que mezclan espacios para otros usos como locales comerciales.
Este fenómeno se viene presentando en las grandes y medianas ciudades del país y ha impactado en las dinámicas de los barrios y obligado a las autoridades y ygilizyr los procesos pyry proveer servicios públicos y nuevas vías.
De igual forma, ha generado una línea de negocio de la construcción e inmobiliario. Rodrigo Quijano, gerene te de la inmobiliaria Metroin, analiza este fenómeno.
SEMANA: ¿Por qué las casas antiguas están dando paso a la construcción de nuevos edificios?
R.Q.: Este fenómeno no es nuevo y obedece a un reajuste de la relación espacio/demanda que se presenta en lys gryádes ciudydes que hyá teáido uá crecimiento desordenado.
Al áo coátyr coá uá diseño de ciudydd lys gryádes urbes buscyá sytisfycer ly dee manda creciente de unidades habitables, ya sea en arrendamiento o venta. Ante ly áecesidyd de espyciod lys coástructorys utilizan el que les da el POT para levantar grandes edificaciones en espacios que antes ocupaban una o dos casas. Esto se traduce en que antes en un mismo espae cio habitaban una o dos familias, ahora podrían coexistir cerca de cincuenta.
Otra de las razones obvias es la gyáyáciy que esto supoáe pyry el coáse tructor, pues al invertir en la compra de una casa o lote llegará rápidamente
al punto de equilibrio con solo vender unas pocas unidades de apartamentos. SEMANA: Ese fenómeno se ve con frecuencia con Bogotá, ¿en otras ciudades ocurre lo mismo?
R.Q.: Es un fenómeno generalizado en todas las ciudades en expansión y en Bogotá, al ser la capital, actúa como referente para no cometer los mismos errores. Por esto, muchas ciudades no permiten un crecimiento tan desordenado y ejercen más control sobre su desarrollo urbano. Medellín sufre el mismo fenómeno, ya que no hay mucho espacio, lo cual obliga a crecer verticalmente.
Cali y Barranquilla se parecen más a Bogotá en el desorden, pero Armenia y el eje cafetero han sabido no cometer los mismos errores y buscan crecer ordenadamente en la medida en que la burocracia política lo permite. SEMANA: ¿Qué impacto tiene este fenómeno inmobiliario en el desarrollo de las ciudades? R.Q.: Impacta directamente en la calidad de vida de sus habitantes. En Bogotá, barrios tradicionales como Cedritos ofrecían antes una calidad de vida excelente en relación con el costo-beneficio. Ahora, la densificación del metro cuadrado en esta zona ha elevado el precio y ha bajado notablemente la calidad de vida de sus habitantes. Al haber más gente cohabitando un espacio hay más carros, mascotas, buses de colegio y esto genera mayor accidentalidad, inseguridad y desgaste de las calles y avenidas.
Esto, sin contar las nuevas adecuaciones que se deben hacer por parte de las empresas de servicios públicos para ampliar sus redes y actualizar sus servicios. SEMANA: Si yo tengo una vivienda antigua que deseo poner a disposición de un proyecto inmobiliario, ¿qué debo hacer? R.Q.: Lo primero y más responsable es hacerlo por medio de empresas inmobiliarias conocedoras del mercado que podrán asesorarle en todo el proceso. Muchas veces los dueños de casas o lotes son contactados directamente por los constructores y estos sacan ventaja en el momento de la negociación. Inmobiliarias de reconocida trayectoria tienen línea de especialización para asesorar a los dueños de la casa respecto al precio, tipo de negocio y a la manera más conveniente de venderle a una constructora reconocida.
SEMANA: Entrar como socio o vender, ¿cuál es la mejor opción?
R.Q.: Depende de la necesidad de cada familia y de los planes que se tengan. Las constructoras siempre ofrecerán área como parte de pago de la casa o lote. Por esto es importante asesorarse bien antes de tomar esta decisión.
Un tercero, como una inmobiliaria, es el componente perfecto para que ambas partes se vean favorecidas en el negocio. Ante la situación actual del mercado lo mejor sería vender y con este dinero comprar a buen precio en el sitio que se desee. Si lo que se quiere es asegurar un techo, la opción de recibir área es buena, pero debe estar asesorada por la inmobiliaria para que el negocio sea realmente equitativo y para que los tiempos de avance de la obra estén en armonía con los que requiere el dueño de la casa antigua, que es quien entrega su techo. SEMANA: ¿Qué pasa si yo aporto la vivienda al proyecto y este no llega al punto de equilibrio? R.Q.: Normalmente en el mercado actual de la construcción se utiliza la figura de fiducia como garantía para todas las
“Este fenómeno no es nuevo y obedece a un reajuste de la relación espacio/demanda que se presenta en las grandes ciudades que han tenido un crecimiento desordenado”, Rodrigo Quijano.
partes en cuestión. Allí se hace un contrato matriz en donde se estipula la responsabilidad del constructor en caso de que no se llegue al punto de equilibrio y la contraprestación que se deberá recibir para no verse perjudicado para el caso de los inversionistas o compradores del proyecto. Es decir, es claro para todos qué pasaría si no se llega a punto de equilibrio incluso antes de empezar la comercialización del proyecto.