GUCCI O BALENCIAGA
ESTAS DOS MARCAS FUERON SEGÚN EL ÍNDICE DE LYST, PLATAFORMA GLOBAL DE BÚSQUEDA DE MODA, LAS MÁS VENDIDAS EN EL MERCADO. JUZGUE SI LO QUE ESTÁN COMPRANDO LOS MILLENNIALS ES TAMBIÉN LO SUYO O LE PARECE IMPOSIBLE DE USAR.
¿Por qué son las marcas más vendidas del mercado y las favoritas de los millennials?
¿Llevaría sus propuestas?
EN LA ACTUALIDAD, cuando todo se puede medir, las cifras de venta de estas dos marcas son impresionantes, por decir lo menos. Uno no puede dejar de preguntarse cuál es el secreto de Alessandro Michele, director creativo de Gucci, y de Demna Gvasalia, cabeza de diseño de Balenciaga, quienes han logrado mover la caja registradora 50 por ciento más respecto a otros años.
Lo interesante es que siendo marcas de lujo, por tanto costosas, tengan ese éxito en el mercado internacional. Una cosa es clara: este triunfo se debe, en gran parte, a la creatividad de sus diseñadores. Tanto Michele como Gvasalia tienen una identidad clara en su diseño y el talento para evolucionar sus propuestas cada temporada sin perder su identidad. En lugar de estar creando desde cero, desarrollan una prenda o un accesorio y lo evolucionan colección tras colección, así los clientes saben qué esperar de la marca.
Pero el éxito no depende solo de la fuerza creativa, la parte del negocio es vital. Ambas marcas tienen la suerte de tener ejecutivos que han conseguido recaudar cerca de un billón de dólares
desde hace tres años. Gucci, por un lado, ha creado una estrategia digital basada en Instagram, red social que maneja un grupo de diseñadores, todos menores de 30 años. Este maximalismo se adapta perfecto a las nuevas tecnologías y es la ventaja competitiva de la marca. Se podría decir que la receta de la gloria es el alcance digital masivo y los precios relativamente moderados.
Aunque Balenciaga es la segunda marca más vendida después de Gucci, los expertos calculan que este va a ser el año de Gvasalia, pues Michele va en la colección número 12 y todos se preguntan hasta cuándo su fórmula seguirá siendo efectiva. Como en Balenciaga no hay un esquema de diseño tan estrecho y el diseñador se nutre del archivo del fundador
–el español Cristóbal Balenciaga– se le augura un futuro mejor.
La influencia que tiene Demna Gvasalia es innegable. Su sensibilidad al estilo de la calle, sus siluetas recargadas y su conexión con los jóvenes hacen que muchos diseñadores intenten copiarlo. Es la sexta marca con más seguidores en Instagram y según datos de la compañía, el 65 por ciento de sus clientes son millennials.