EL MERCADEO FEMINISTA
Sylvia, otra de las hijas de Emmeline Pankhurst, diseñó los logos, símbolos y las piezas de la campaña de comunicación y mercadeo que se convirtieron en los emblemas de la lucha del movimiento sufragista en Inglaterra: la banda tricolor violeta (dignidad), blanco (pureza) y verde (fertilidad y esperanza en el futuro) con la leyenda “Votes for women”; la revista con el mismo nombre, botones con las caras de Emmeline y otras lideresas del movimiento, carteles, postales y bufandas. Además había himno
(Women on the march)y
hasta juegos de mesa.
En el Museo de Londres reposa toda esa memorabilia, sin la cual no habría soporte testimonial de esta lucha.
La palabra suffragette –o sufragista– nació en el periódico inglés Daily Mail, que lo utilizó de modo un poco burlón y despectivo para referirse a esas mujeres locas que estaban exigiendo su derecho al voto con maneras histéricas. Pero, distinto a su intención, las mujeres encontraron en el nombre su mejor aliado, su identificación y el que quedaría en la historia.