COSECHA DE DISEñO
ALEJANDRA SERNA Y ELISA LUQUE, CREADORAS DE ALELí HOME DECOR, LE APUNTAN A CULTIVAR HOGARES EN LOS QUE PRIME LA CALIDEZ POR ENCIMA DE LAS TENDENCIAS DEL MOMENTO.
ALELí FUSIONA LAS PRIMERAS LETRAS DE LOS NOMBRES DE ALEJANDRA Y ELISA. Hace cinco años, en Bogotá, fundaron su marca y con el ícono de una regadera y el eslogan “We harvest your home” (“Cultivamos su hogar”) iniciaron la trayectoria de una estética que se inspira en el estilo de la campiña francesa y lo reinterpreta en una combinación de madera, cuero y metal. Alejandra Serna estudió Arquitectura en la Universidad de los Andes y en el Instituto Europeo de Diseño de Sao Pablo se especializó en Diseño de muebles. Su socia, Elisa Luque, se graduó del programa de Artes Visuales de la Javeriana y en el 2013, cuando tomó el camino del emprendimiento, viajó a Nueva York a hacer un curso intensivo en Diseño de interiores en el instituto Pratt. Alelí Home Decor, que comenzó en un área de 12 metros cuadrados, está estrenando un local de 150 en el que exhibe sus piezas con la posibilidad de ser personalizadas para cada espacio, y sus propietarias se encargan de que sus clientes, en sus casas, cosechen un hogar cálido, con historia y con un ADN donde convergen las formas clásicas y materiales actuales. un 60 por ciento porque no cansan, pero es una delicia matizar con colores y jugar con la paleta para darle el sentido que se busca a cada espacio. Es una maravilla poder asesorar a la gente para animarle a incluir dos o tres toques de color.
En el diseño no hay pecados. Eso depende del gusto de la persona y todo es posible. Hay ciertas reglas que uno trata de usar porque sabe que funcionan, pero todas las reglas se pueden variar dependiendo del estilo del diseñador y del cliente. No hay pecados en el diseño, hay estilos y gustos. Y los gustos son respetables. Materiales nobles, maderas reales, cueros naturales y metales reales. Acero inoxidable. No tenemos nada en contra de él, existen marcas que lo trabajan a la perfección, pero aquí no hay. Que no sea recargado. La simplicidad es importante. La luz natural debe tenerse en cuenta para diseñar y debe existir armonía entre lo que se escoja, trátese del uso de materiales o en la paleta de colores.
El incumplimiento de los proveedores.
En Bogotá la gente se encasilla con lo contemporáneo y tiende a buscar lo último. Acuden a lo minimalista por no arriesgarse a jugar en la mezcla de lo contemporáneo con diseños de línea clásica ,que les dan más calidez a las cosas. El minimalismo crea espacios fríos, pero cuando se dejan asesorar y permiten que uno meta cosas más cálidas, con más historia, el resultado es más interesante. Finalmente, el diseño es historia.
Los espacios que cuentan una historia, que son una realidad de la vida de las personas. Que transmiten las fascinaciones de los que la habitan. Nos inspiran las historias de los clientes.