PUNTO FINAL
DESDE LA PRÁCTICA, LA INVESTIGACIÓN Y LA ACADEMIA, RÓMULO POLO ES UN IMPORTANTE PERSONAJE EN EL DESARROLLO Y LA PROFESIONALIZACIÓN DEL DISEÑO INDUSTRIAL EN COLOMBIA. HOY, SE ENCUENTRA PREPARANDO UNA PUBLICACIÓN DONDE RECOGE ESTA HISTORIA DISPERSA.
Rómulo Polo, primer decano de Diseño Industrial de la Universidad Javeriana, contestó nuestro cuestionario.
Nació en Bogotá, en 1945. Cuando Rómulo Polo Flórez terminaba clases en el Agustiniano salía corriendo a ver exposiciones en la Luis Ángel Arango y a escuchar las conferencias de Marta Traba en el Sena. Tenía 18 años cuando se creó el MamBo y el arte moderno lo tenía cautivado. Decidió estudiar Arquitectura después de recibir halagos del profesor de dibujo del colegio cuando entregó una perspectiva del edificio de Ecopetrol; se presentó en la Universidad Nacional y pasó con beca y residencia. Enrique Triana Uribe, Dicken Castro, Édgar Burbano fueron algunos de sus profesores. Trabajó en Artesanías de Colombia, tomó los cursos de Jaime Gutiérrez Lega en Los Andes sobre Diseño Industrial y de Muebles, obtuvo el primer premio de la Bienal de Coltejer de 1972 con una obra de arte efímero, reformó desde la gráfica de los formularios hasta las oficinas de Impuestos Nacionales, y en 1977 fue el primer director de la carrera Diseño Industrial en la Universidad Javeriana. Rómulo promovió la creación de la Asociación Latinoamericana de Diseño (Aladi), fundó la empresa Proyectos y Prototipos, durante una década escribió artículos sobre diseño en EL TIEMPO, y sus ensayos y críticas hicieron parte de la revista Proyecto Hoy, sigue vinculado a la academia como consultor y en sus archivos está organizando una publicación sobre la historia del diseño en Colombia, trayecto en el que ha sido forjador desde la academia.
¿Cómo fue su paso por la Nacional?
Fui un estudiante muy activo. Me iba a explicarles a los policías por qué estábamos en paro. Nunca asimilé, compartí, ni comprendí el tema de la violencia. Por el contrario, traté de ser creativo.
¿Qué pasaba en la escena académica?
Entré en el 65 y la escuela transitaba hacia el modernismo. Ya se había superado la enseñanza clásica del tema de Vitruvio y las formas plásticas de la vieja escuela.
¿Quiénes hacían parte del cuerpo docente?
Algunos de los profesores, como Enrique Triana Uribe, Dicken Castro, Édgar Burbano y Arturo Robledo, habían estado en Chicago y Nueva York cerca de maestros como Walter Gropius y Mies van der Rohe. Ellos introdujeron el concepto del curso básico que era como una retoma de la Bauhaus.
Estructuró la carrera de Diseño Industrial en la Javeriana con un programa muy orgánico.
El montaje y el desarrollo los hice con Hernán Lozano y con Mauricio Olarte bajo conceptos que se asimilan a la didáctica del diseño. Jesús Gámez entró después, y graduado que llegaba del exterior, lo metía. Llegaron alemanes y norteamericanos, integré gente de arte e hicimos un esfuerzo interdisciplinario que incluía filosofía, ciencias básicas, medicina, ingeniería…
Y cursos en el Sena.
Parte de la filosofía de la carrera era la necesidad de una relación muy intensa y real con el sector productivo. En el nivel primario, los estudiantes tomaban cursos específicos de tecnología en metalmecánica, máquinas y herramientas, moldes, plásticos, artes gráficas, maderas y electricidad.
¿Qué busca en una pieza de mobiliario?
Equilibrio en los factores y correspondencia con su contexto, porque ni los muebles ni las cosas son universales. El diseño es una metodología, una resolución de casos y una respuesta lógica y consecuente a cada circunstancia, teniendo en cuenta un equilibrio entre el ser humano, la tecnología y los aspectos económicos, socioculturales y ambientales.
Un error del diseño.
Haber asumido cierta responsabilidad sobre los mitos de la industrialización. Los daños ecológicos no los produce el diseñador. Los produce el químico que se inventó el plástico y el proceso inadecuado.
¿Cuál es el papel del diseñador?
Si no es consciente, colabora en una mala causa. Si sí lo es, pelea para que se oriente bien.
¿Qué mensaje les daría a los profesores de esta generación?
Dejen que los muchachos aprendan desde su propia experiencia. No traten de enseñarles.