Samy Bessudo
LECCIONES APRENDIDAS
Estamos sobreviviendo a una situación impensable. Hace tres meses nadie se hubiera imaginado que los países cerrarían sus fronteras; los hoteles, sus puertas y las aerolíneas, sus vuelos. Tampoco que todos estuviéramos encerrados, trabajando desde casa, acomodándonos a una nueva realidad mundial.
Tuvimos que reaprender. Escuchar más. Poner a disposición nuestra mejor versión para lo que afrontamos como humanidad y como empresa. Primero, defendiendo ante todo el ingreso de las familias y la protección de la salud de nuestros colaboradores. Segundo, reinventándonos como lo hemos hecho ya durante 63 años, para hacer lo humanamente posible por lograr la sostenibilidad de la empresa.
Nos estamos adaptando. Desde el día uno de la pandemia volcamos nuestra fuerza comercial para mantener la atención a nuestros clientes a través de nuestra central de reservas 24/7. Además, seguimos robusteciendo nuestros canales no presenciales. Y si bien creemos vislumbrar que solo hasta diciembre de 2022 se alcancen los porcentajes de lo que fue la actividad a diciembre de 2019, ya estamos pensando cómo incentivaremos a los viajeros hacia un nuevo turismo: el verde y sostenible.
Reconocemos que quizá existan muchos miedos para retomar los viajes, pero nuestra tarea será darle esa confianza que necesita el viajero para que, por lo menos inicialmente, descubra el país, su gente, los paisajes y las experiencias enriquecedoras que ofrece cada lugar, siempre de manera responsable. Ya tenemos más de 450 programas listos para invitar a los viajeros a planes de naturaleza, aventura, salud y bienestar, avistamiento de ballenas y aves, turismo rural, cultural, sol y playa, entre otros.
Si hay algo que deja muy claro esta pandemia, es que no podemos repetir los mismos errores. Llegó el momento de darnos cuenta de la huella que dejamos en los lugares que visitamos, en sus comunidades, en su fauna y en su flora. Las cadenas y jaulas no son parte de un turismo sostenible; tener un encuentro inesperado, libre, en medio de un bosque o mientras exploramos el mar, sí. Esta es la casa de todos y debemos cuidarla. Hay que pensar distinto y nosotros ya lo estamos haciendo.