Ivanka quiere ser la primera presidenta de Estados Unidos
con motivo del lanzamiento de su libro Raising Trump. Aseguró que tenía línea directa con la Casa Blanca, pero que no usaba esa prerrogativa para no causar “ninguna clase de celos” y remató con unas frases osadas: “Soy, básicamente, la primera señora Trump, soy la primera dama”. Melania, que es tan discreta, respondió, a través de su portavoz, quien les dijo a los periodistas: “La primera dama planea usar su posición para ayudar a los niños y no para vender libros. No hay ninguna sustancia en esta declaración de una exesposa, solo una egoísta búsqueda de atención”.
La examiga de la primera dama cree que mientras que Ivanka está realmente obsesionada con Melania, esta a menudo se molesta o se divierte con sus actitudes, pero no la trasnocha tanto. Luego de su intento fallido para evitar que Donald nombrara a su hija en una posición tan alta en su administración, se resignó ante el hecho de que ella, Jared Kushner y sus colaboradores controlan la Casa Blanca con las artimañas propias de la “banda de serpientes” (así los llama), que son, concluye
libro.• el
Melania soltó la carcajada cuando vio las polémicas imágenes de su marido diciendo que a las mujeres les gustaba que un famoso como él les tocara sus partes íntimas sin avisar.