María Victoria Daza
La Guajira
Se acaba de bajar del avión. Hasta hace unas semanas su casa estaba en Sídney, Australia, donde cursaba una especialización en Relaciones Públicas Estratégicas. Se dice leal, tanto a sus convicciones y valores, como a las personas que la rodean.
Creció en una familia de ingenieros. Su padre es experto en metales, su hermana estudia ambiental y ella no se quedó atrás: es ingeniera industrial de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá. Su mamá, arquitecta, le enseñó el amor al arte, y tal vez por esa influencia ahora está enfocada en abrirse paso en la industria de la moda, a través del periodismo y la organización de eventos.
Siempre ha sido muy social, con una capacidad especial para relacionarse con los demás. Lo que de pequeña le fue diagnosticado como hiperactividad, hoy es su fuente de energía extra para crear.
Encontró en el reinado su espacio perfecto para arriesgarlo todo y salir de su zona de confort. Su inspiración fue uno de sus amigos más cercanos quien falleció este año y le dejó claro que la vida es ahora o nunca. En el certamen representará a La Guajira en honor a su abuelo, un académico entregado a la comunidad quien fue su ejemplo y, hoy en día, su legado.
Durante la pandemia concentró sus esfuerzos en ayudar a estudiantes internacionales quienes, como ella, estaban lejos de casa y necesitaban de una mano amiga.
de papel,
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