Natalia Garizabal
Magdalena
Natalia es perseverante, intelectual y emocional, pero sobre todo, segura de sí misma. A sus 18 años estudia Derecho y se lanza por primera vez como candidata para demostrarles a quienes tienen una imagen negativa de los reinados que la belleza no es sinónimo de plasticidad y que una reina tiene mucho más que ofrecer que solo su aspecto físico.
Dice que la gente de su generación no teme alzar la voz. Cree en el poder de los jóvenes y en las redes sociales como motor para incentivar el cambio y promover la justicia social. Desde su cuenta de Instagram promueve el amor propio y da claves para construir la autoestima.
Desde el comienzo de la pandemia, ha trabajado junto a su familia para donar mercados a personas en condiciones de vulnerabilidad. Adicionalmente, hace cinco años mantiene vivo su iniciativa de celebrar la Navidad con los niños de bajos recursos de su comunidad.
Su canción favorita es Amor eterno, de Rocío Durcal, le trae a su mente un recuerdo que aún la hace llorar: cuando era muy niña participó en un concurso, y le dedicó esta canción a su abuela materna. Solo unos días después ella falleció: para Natalia fue una despedida anticipada y el comienzo de un amor y lealtad que marcó su vida.